La fe es sagrada para los creyentes, pues es una forma de encontrar el camino, de sentirse protegido, de saber que no se está solo y que las cosas pueden ser mejores. Es aquí cuando los salmos toman un protagonismo.

De acuerdo con la oración del cristiano, “Los Salmos son un Himno de alabanza a Dios, Creador de todas las cosas. Es decir, el hombre, desde muy antiguo, miró a su alrededor y vio la infinita variedad de seres que viven en el mundo. Vio cómo hay tantos seres distintos de otros. Y que todos siguen sus leyes a la perfección”.

“El hombre vio la hermosura de los prados y la belleza de los mares y los cerros... El hombre se extasiaba contemplando el firmamento estrellado... Y así fue cómo sintió la necesidad de elevar un canto al Creador. Un canto que fuera una acción de gracias y una alabanza a Dios: Esto son los Salmos. Las alabanzas más hermosas que existen”.

Para el creyente Dios es su provisión. | Foto: Getty Images

Hay momentos en la vida en las que se pierde el camino, en el que las cosas no salen como se esperaba, en el que la oscuridad aparece y la vida que se conoce se desmorona. Es aquí en donde los Salmos pueden dar esa fuerza que tanto se necesita para cambiar y volver a ver la luz.

En este caso, se trata del Salmo 63 que según expertos en el tema, este es aquel que sirve cuando se pierde el rumbo, cuando las cosas se ponen difíciles y se aleja del Señor.

Salmo para los momentos difíciles en la vida

Para los creyentes, la oración es hablar con Dios. | Foto: Getty Images

Salmo de David cuando estaba en el desierto de Judá

“Dios, tú eres mi Dios; yo te busco intensamente. Mi alma tiene sed de ti; todo mi ser te anhela, cual tierra seca, sedienta y sin agua.

Te he visto en el santuario y he contemplado tu poder y tu gloria.

Tu gran amor es mejor que la vida; por eso mis labios te alabarán.

Te bendeciré mientras viva y alzando mis manos te invocaré.

Mi alma quedará satisfecha como de un suculento banquete, y con labios jubilosos te alabará mi boca.

En mi lecho me acuerdo de ti; pienso en ti en las vigilias de la noche.

La biblia es la palabra de Dios para los creyentes y en ella encuentran versículos de protección. | Foto: Getty Images

A la sombra de tus alas, cantó de alegría, porque tú eres mi ayuda.

Mi alma se aferra a ti; tu mano derecha me sostiene.

Los que buscan mi muerte serán destruidos; bajarán a las profundidades de la tierra.

Serán entregados a la espada y acabarán devorados por los chacales.

El rey se regocijará en Dios; todos los que invocan a Dios lo alabarán, pero los mentirosos serán silenciados”.