Tiene razón, Mauricio Salazar, cuando en esta entrevista asegura que muchas veces nos imponemos limitaciones para no hacer lo que queremos, pero, cuando realmente nos lo proponemos objetivamente, las sobrellevamos. Querer es poder, y este hombre que pasó 18 años en la piel de un empresario en el sector de tecnología y luego quiso reinventarse y transformar su vida desde el deporte, los retos y las aventuras asociadas a la expedición, pudo. Pudo tanto que obtuvo un Guinness Récord al convertirse el primer ser humano en completar un triatlón a más de 4,000 metros de altura.
Por ese recorrido, por la pasión que lo sigue impulsando y por el ánimo de compartir lo que ha visto en el camino de la autoexigencia y el descubrimiento, ahora Salazar pretende inspirarlo a usted (a hacer lo mismo, a su manera individual). El manizaleño es consciente de que no todos tenemos sus capacidades físicas, pero explica que, si bien no todos podemos practicar el deporte, a todos nos hace bien la aventura. En ese sentido, a través de su docuserie Reto Aventura, que estrena este 10 de junio, a las 9:10 p.m., en Discovery Channel, Mauricio comparte el espíritu y la curiosidad que lo ha llevado a paisajes asombrosos capaces de cortar la respiración y sí, así a varias situaciones que activaron sus nervios. Para Salazar, vivir es también arriesgarse, salirse de la zona de confort.
Es a través de su visión de “no rendirse”, marcada por la filosofía de renacer, superar barreras y compaginar cuerpo y mente, que este ultraman colombiano pretende cautivarlo. Y Discovery confía de lleno en sus capacidades, pues lo hizo el nuevo talento con el que la marca le apuesta a contenidos de aventura en Colombia. Hablamos con él al respecto. Esto nos dijo.
SEMANA: Cuéntenos sobre ese cambio de chip que de empresario lo lleva a ser un aventurero, ultraman y un récord Guinness...
Mauricio Salazar: Creo que son como capítulos que todos tenemos en la vida. Mi primer capítulo fue como empresario en el sector de tecnología, donde pasé casi 18 años. Y después de un proceso muy personal empecé a hacer una transición. Me logré retirar a los 35 años, y ahí encontré en el deporte un nuevo camino para desafiarme y para encontrar nuevos retos. Empecé a enfrentar las pruebas de ultraresistencia más duras del mundo, pero no porque me las fuera a ganar, porque arranqué viejito para el deporte.
Y fue en esa transición y a través de esos desafíos que me conecté con el tema de la naturaleza, porque me tocaba entrenar en unos lugares muy hostiles, tanto en Colombia como fuera del país. Ahí nació toda esta iniciativa de poder contárselo a la gente a través de Reto Aventura, por Discovery.
SEMANA: Este es el capítulo de la televisión, haciendo este programa, ¿qué descubre de usted mismo y de la televisión?
M.S.: Es un proceso que, para quienes como yo no tuvimos este como oficio inicial, que no hicimos trayectoria de décadas en ese campo, se vuelve una responsabilidad. El privilegio de compartir con la gente estas historias, que vengo viviendo hace unos años y me han transformado como persona, representa una emoción muy grande, pero sobre todo una responsabilidad, porque esto termina siendo una invitación: la invitación a que vos y la gente, después de que vean Reto Aventura, empaquen la maleta y empiecen a vivir su propia aventura. Es una mezcla interesante.
Esto termina siendo una invitación: la invitación a que vos y la gente, después de que vean Reto Aventura, empaquen la maleta y empiecen a vivir su propia aventura. Es una mezcla interesante
SEMANA: Usted ha recorrido escenarios increíbles, hostiles, y nos los mostrará, pero nos quiere invitar a nosotros, quienes quizá no tenemos esa preparación...
M.S.: Honestamente, sí hay unas pruebas de deporte donde uno lleva el cuerpo y la mente al límite, pero en estos escenarios no trato de conectar coin el público desde ahí, sino desde la exploración. Siento que el deporte no le tiene que gustar a todos, que no todos tienen que practicarlo, pero que vivir aventuras debería ser transversal a cualquier ser humano: esa curiosidad natural. Y de eso se trata este espacio.
A veces uno se pone unas limitaciones que, si las ve de manera objetiva, son fáciles de romper, y de eso se trata. Vivir aventuras debería ser transversal a cualquier ser humano
También es importante mostrar que no es necesario ir al otro lado del planeta para vivir una gran aventura. Me imagino que vives en Bogotá, y no tienes que ir muy lejos, tienes a Chingaza a menos de dos horas. A veces uno se pone unas limitaciones que, si las ve de manera objetiva, son fáciles de romper, y de eso se trata, de que cada uno vaya y busque su aventura.
SEMANA: Cubre la Orinoquía, ¿qué tanta deliberación hubo en decidir que esta sería la región a recorrer en esta temporada? ¿Habrá segunda?
M.S.: Tendrá más temporadas, e iremos explorando el país de una manera bien emocionante. En esta temporada, planteamos Reto Aventura como un formato de expedición; uno que va en busca de tesoros naturales y culturales. Personalmente escogí la Orinoquía porque siento que es un lugar de contrastes, que tiene la segunda cuenca más megadiversa del planeta, una cosa muy loca que nadie sabe (místico y hostil, concentra el 32% de la reserva de agua dulce en Colombia).
Y ese es el segundo elemento, el desconocimiento de este territorio. A todos nos dicen “Llanos orientales” nos imaginamos un potrero con ganado. Y eso es un pedacito de lo que realmente es la Orinoquía: tiene Andes, tiene piedemonte; tiene sabanas inundables, altillanura; es mucho más de lo que todos nos imaginamos. Por eso escogimos esta región, para mostrar toda esa fauna increíble que tiene (desde el jaguar, el cocodrilo, la anaconda... en fin) hasta unos paisajes alucinantes, como el rio Güejar, como el río Tomo, ese límite del Parque el Tuparro. Y vamos yendo por los departamentos del Meta, Casanare, Vichada, mostrando unos lugares increíbles y reflejando unas expediciones muy bacanas que seguro los van a antojar.
SEMANA: Los paisajes de esta región son especialmente sobrecogedores...
M.S.: Al estar allá, en medio de esos paisajes, a uno se le salen las lágrimas. A mí, no me da pena decirlo; varias veces me pasa en estas expediciones que llego a lugares y vivo una avalancha de emociones.
Escogimos esta región, para mostrar toda esa fauna increíble que tiene (desde el jaguar, el cocodrilo, la anaconda... en fin) hasta unos paisajes alucinantes, como el rio Güejar, como el río Tomo
SEMANA: ¿Sabe qué explorará en las próximas temporadas?
M.S.: Por ahora, estamos disfrutando esta. Con Discovery sí hemos tenido conversaciones sobre los posibles lugares, pero será una sorpresa cuando llegue el momento.
SEMANA: ¿Qué le representa ser la imagen de Discovery en este país y trabajar con ellos?
M.S.: Fue un proceso muy chévere, porque conceptualmente había una conexión muy fuerte. Lo que yo venía haciendo en mi vida, hace muchos años, con y sin redes sociales, era muy Discovery. La conexión fue natural, y el resto del proceso implica negociaciones y demás, que tiene su rollo. Pero las personas de Warner Bros. Discovery me han hecho sentir en casa desde el comienzo. A partir de ahí, vino establecer el formato, y conectar esas formas de contar historias, que fue muy fácil. Para mí, lo loco es pensarme hace muchos años, mucho más joven, viendo esas historias en el que era Discovery Channel. Crecí viendo el canal, y ahora tengo la oportunidad de contar las historias para que la gente conozca estos lugares. Esto es un solle brutal.
SEMANA: Seguramente enfrentó retos muy duros, ¿hubo algo a lo que no se le midió?
M.S.: Hay unos que uno hace con miedo. Dan susto. Pero parte del formato es precisamente enfrentar esos miedos, y, salga como salga, dar el paso. Por ejemplo, navegar en unos rápidos, pero no en balsa, donde se está acompañado y se siente más seguro, sino en kayak, solo. ¡Ese es otro paseo! Si uno no es experto en manejarlo, es duro; me dio vueltas todo el tiempo, y yo quedaba con la cabeza para abajo, dentro del agua. Cosas de ese estilo sucedieron, cosas que uno supera y se ríe al final, pero asustan.
Otra cosa muy emocionante fueron los encuentros con los animales en su estado salvaje. Eso sí es una cosa muy loca. Si spoilear demasiado, tuve encuentros muy cercanos con anacondas de tres, cuatro metros; con cocodrilos de cuatro, a cinco metros. Vivir eso es una cosa que te llevas muy adentro.
SEMANA: En el escenario de televisión, aventura y naturaleza, ¿hay referentes que lo inspiraron?
M.S.: Por supuesto, uno tiene una lista de referentes, que viene de mucho antes de empezar esto. Están Bear Grylls y James Stafford, gente muy Discovery toda la vida. Y en Colombia también hay personajes que han abierto puertas, desde hace décadas, como el mismo Pirry, personajes que uno tiene que valorar, personas que han hecho una trayectoria y un camino para los que queremos seguir contando historias. Hay referentes en todos los niveles, y de todos los sabores y colores. Resalto a los de fuera y también a los de Colombia.