Si hay algo que se puede decir que no se puede cambiar en la vida es el pasado. Sea bueno o malo, este ya está escrito y no hay nada que hacer para modificarlo, pero lo que si se puede transformar es el presente y asimismo el futuro.
Por más complejo que parezca, es posible dejar una versión de nosotros mismos atrás para ser una mejor versión en el ahora. Para este proceso, que puede llegar a convertirse en todo un reto, ir de la mano de Dios es crucial, pues bajo su protección y guía es posible cambiar.
La Biblia habla de que no importa cuantas veces se caiga o se pierdan las personas del camino, lo importante es cuantas veces se recuperen y decidan cambiar para ser mejores personas que viven bajo los designios del Señor. Portales especializados comparten estas tres oraciones para esos momentos en los que se quiere iniciar desde cero.
Oración 1
“Padre Celestial, me estoy preparando para comenzar un nuevo camino en la vida. Los sentimientos de miedo y lo desconocido me han hecho dudar de este camino.
Me pregunto si esto es lo que Tú quieres para mí. ¿Te estoy escuchando o estoy tomando esta decisión por razones egoístas? ¿Estoy diciendo “sí” a este nuevo viaje solo para complacer a los demás? ¿O estoy escuchando Tu voluntad para mi vida? Padre, guíame.
Dame sabiduría, discernimiento y revelación en este nuevo día. Oro para que me des las palabras y acciones para ayudar a otros a acercarse a ti. Por favor, haz este nuevo viaje de vida para ayudarme a tener una relación más cercana contigo.
Ayúdame a ponerte a Ti primero, no a mí mismo. (Gálatas 6:14) En cada momento, recuérdame Tu Santa Presencia y amor. Recuérdame que tú tienes el control, no yo. Gracias Dios”.
Amén.
Oración 2
“Querido Señor, hoy soy una persona nueva y eso es gracias a Ti.
Padre , me has mostrado que mi vieja vida se ha ido y mi nueva vida se encuentra contigo. Estoy agradecido de no insistir en mis errores del pasado y revivir esos tiempos horribles.
Estoy agradecido de seguirte a ti y al camino que has creado para mí. Mi alma tiene sed de Ti y ahora, con mi nueva vida, estoy lleno de Tu Santa Presencia. (Ezequiel 36:26) Gracias, Dios.
Oro para poder compartir las buenas nuevas de una nueva vida en Cristo con todos. Gracias, Padre, por las personas que has puesto en mi vida que nunca se dieron por vencidas conmigo.
Gracias, Padre, por la familia, los amigos y los extraños que me mostraron Tu amor a través de sus palabras y acciones. Oro para ser más como esos mentores que has proporcionado. Permíteme hacer brillar la luz de Cristo para que otros se acerquen a Ti. En Tu Nombre”.
Amén.
Oración 3
“Padre, gracias. Gracias por los nuevos comienzos que brindas en cada momento. Mi cuerpo está lleno de alabanza y acción de gracias por el amor, la misericordia, la gracia y el perdón que das.
Incluso cuando fallo, Tú estás ahí esperando para levantarme y guiarme de vuelta al camino que tienes preparado para mí. Has puesto personas maravillosas en mi vida para ayudarme a seguirte. Gracias por esas personas especiales.
Te alabaré en las tormentas y te alabaré en las alegrías. (Filipenses 4:4) Gracias, Dios, por nuevos comienzos”.
Amén.