A lo largo de la existencia humana se conocen muchas personas que pasan, se quedan o se van del camino de la vida. Cada una de ellas deja una huella, una marca o una cicatriz de formas positivas o negativas.

Por otra parte, si aparecen retos difícil de enfrentar, de estos se puede sacar un aprendizaje, por más complejo que pueda parecer. En algunas ocasiones, estos momentos complejos pueden darse por la aparición de personas que pueden hacer daño y lastimar.

Es aquí cuando se puede recurrir a Dios para poder alejarlas y que estas no afecten el bienestar, el camino y las metas propias que se tienen. Las malas compañías siempre van a rondar, pero depende de cada quien alejarlas y que ellas sigan su camino lejos del camino de uno mismo.

En los escritos sagrado de la biblia aparecen diversos versículos que pueden servir para fortalecerse y alejar a todas aquellas personas que buscan hacer el mal.

Versículos de la Biblia para una ruptura que pueden ayudar a superar esta situación difícil. | Foto: Getty Images

Versículos de la biblia para alejarse de las malas compañías

Corintios 15:33-34

“No se dejen engañar: ‘Las malas compañías corrompen las buenas costumbres. Vuelvan a su sano juicio, como conviene, y dejen de pecar. En efecto, hay algunos de ustedes que no tienen conocimiento de Dios; para vergüenza de ustedes lo digo”.

Santiago 4:4

“(Oh almas} adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad hacia Dios? Por tanto, el que quiere ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios”.

La biblia es la palabra de Dios para los creyentes y en ella encuentran versículos de protección. | Foto: Getty Images

Proverbios 12:26

“El justo es guía para su prójimo, pero el camino de los impíos los extravía”.

Eclesiastés 4:9-10

“Más valen dos que uno solo, pues tienen mejor remuneración por su trabajo. Porque si uno de ellos cae, el otro levantará a su compañero; pero ¡ay del que cae cuando no hay otro que lo levante!”.

Esta n es la primera vez que un colegio prohíbe la biblia. | Foto: Getty Images

Romanos 13:4

“Pues es para ti un ministro de Dios para bien. Pero si haces lo malo, teme; porque no en vano lleva la espada, pues ministro es de Dios, un vengador que castiga al que practica lo malo”.

Samuel 18:1-3

“Y aconteció que cuando él acabó de hablar con Saúl, el alma de Jonatán quedó ligada al alma de David, y Jonatán lo amó como a sí mismo. Y Saúl lo tomó aquel día y no lo dejó volver a casa de su padre. Entonces Jonatán hizo un pacto con David, porque lo amaba como a sí mismo”.

Proverbios 27:5-6

“Mejor es la reprensión franca que el amor encubierto. Fieles son las heridas del amigo, pero engañosos los besos del enemigo”.