Las finanzas personales son el reflejo de la buena o mala administración de dinero o bienes de una persona. Cuando estos no se gestionan correctamente, se pueden incurrir en gastos necesarios que pueden ocasionar problemas financieros.
De esta manera, es fundamental tomar en cuenta ciertos hábitos como hacer un presupuesto en el que se denoten los ingreso y los gastos durante el mes, tener un plan de ahorro para las emergencias, evitar solicitar tarjetas o créditos innecesarios, invertir en educación financiera y establecer ciertas metas para mantener los objetivos financieros claros.
De otro lado, muchos creyentes acuden a poderosas oraciones para mejorar las finanzas o superar alguna situación de dinero. De hecho, existen ciertos versículos de la santa Biblia, que hace referencia fragmentos breves que deja cierta enseñanza y reflexión.
Por su parte, la Sociedad Bíblica de Argentina da a conocer algunos versículos que ayudan a evitar caer en tentaciones en cuanto a las finanzas personales:
Proverbios 3.9
Honra a Jehová con tus bienes,
Y con las primicias de todos tus frutos.
Eclesiastés 5.10
El que ama el dinero, no se saciará de dinero;
y el que ama el mucho tener, no sacará fruto.
También esto es vanidad.
2 Corintios 9.6
Pero esto digo: El que siembra escasamente,
también segará escasamente;
y el que siembra generosamente,
generosamente también segará.
Mateo 6.24
Ninguno puede servir a dos señores;
porque o aborrecerá al uno y amará al otro,
o estimará al uno y menospreciará al otro.
No podéis servir a Dios y a las riquezas.
Hechos 20. 35b
Más bienaventurado es dar que recibir.
Oración para multiplicar el dinero
“Dios Todopoderoso, Padre Eterno y Dador de toda gracia y misericordia, acudo a ti en este día con humildad y esperanza, buscando tu guía y tu bendición. Te reconozco como la fuente de toda riqueza y prosperidad, y te pido que me ayudes en este momento de necesidad, en el que me encuentro sumergido en deudas que parecen insuperables.
Te ruego, Señor, que me des la sabiduría para administrar de manera efectiva los recursos que me has confiado. Ayúdame a encontrar una salida para el pago de mis deudas, a hacer los ajustes necesarios en mi estilo de vida y a evitar caer en la tentación de gastar más de lo que tengo. Concédenos la disciplina y la prudencia para no caer en deudas futuras y para manejar nuestras finanzas con integridad y responsabilidad.
Señor, también te pido que bendigas el trabajo de mis manos. Permíteme encontrar oportunidades para aumentar mis ingresos, para que pueda pagar mis deudas más rápidamente y tener suficiente para mantener a mi familia y así también ayudar a los necesitados. Que cada día sea una oportunidad para demostrar mi fe en ti, trabajando con diligencia y honradez, confiando en que tú proveerás lo que necesitamos.
Además, Dios amado, te suplico que me des paz en medio de esta tormenta financiera. Que la ansiedad por las deudas no robe mi alegría ni mi confianza en ti. Ayúdame a recordar que tú eres mayor que cualquier problema que pueda enfrentar y que tienes el control de todas las cosas.
Finalmente, Dios de amor y misericordia, te doy gracias por todas las bendiciones que has derramado sobre mí y mi familia. Te agradezco por tu providencia constante, incluso en los momentos más difíciles. Te agradezco por la fe que me permite confiar en ti, por la esperanza que me ayuda a ver más allá de mis circunstancias actuales, y por el amor que me recuerda que nunca estoy solo.
Te pido todo esto en el nombre poderoso de Jesús, creyendo que tú eres capaz de hacer mucho más de lo que podemos pedir o imaginar. Amén.”