Lady Gaga y el actor Joaquin Phoenix protagonizan una historia de amor desquiciada y musicalizada en la segunda parte de la historia del Guasón, Joker: Folie à deux, estrenada en competición este miércoles en Venecia.
La primera parte, dirigida por Todd Phillips, fue una de las revelaciones de 2019 y se llevó el León de Oro en la Mostra.
Los elogios fueron unánimes para un Joaquin Phoenix que aparecía en la pantalla como un personaje lunático, extremadamente delgado e inquietante, una interpretación que mereció el Óscar al mejor actor masculino.
Esta nueva cinta de Todd Phillips eleva la apuesta con la aparición del personaje de Harley Quinn, y algunas otras sorpresas que pueden ser polémicas para los fans de DC Comics y del archivillano de Gotham City.
Entre ellas, numerosas actuaciones musicales de Lady Gaga como Harley Quinn y del propio Phoenix, que al principio tuvo miedo a cantar con la megaestrella del pop.
“Ella me dijo: ‘vamos a cantar en directo’. Y yo contesté: ‘no, ni hablar’”, reveló el actor en rueda de prensa, entre risas, junto a Lady Gaga.
“Pero luego lo hicimos, porque era la única manera. Cada interpretación era en directo”, durante el rodaje, explicó Phoenix.
“Trabajamos muy duro en la manera de cantar. Para mi fue, en cierta manera, como desaprender a cantar, olvidar cómo hay que respirar, y dejar que la canción surja totalmente del personaje”, declaró la intérprete de “Bad romance”, que anunció justo antes de desembarcar en Venecia que sacará un nuevo álbum en octubre.
El amor como rebelión
En Joker: Folie à deux, Lady Gaga intepreta a una Harley Quinn que no es la psiquiatra del Joker, como encarnó la actriz australiana Margot Robbie, una versión sexy y alocada del personaje en “Escuadrón Suicida”, en 2016.
Su personaje es el de una mujer internada en el mismo penal que el Joker, quien cumple condena por los asesinatos que cometió en la primera película.
Cuando los ponen en el mismo grupo de presos para cantar, estalla el romance.
El juicio del Joker por esos crímenes empieza en Gotham City, y como no podía ser de otra manera, es televisado.
En las calles de la caótica ciudad crece el apoyo al Joker. Pero ese personaje apático, sometido a un brutal tratamiento en la cárcel, tiene ahora un nuevo motivo para rebelarse: está enamorado.
Mucha más expectación
Lady Gaga opta en esta película sombría y pesimista por hacer lo que mejor sabe: cantar.
“No diría que es una comedia musical, es muy diferente. Utilizamos la música, realmente darles a los personajes una manera de expresarse, porque el diálogo no es suficiente”, reveló la megaestrella.
“Hay mucha más expectación con la segunda parte que con la primera, así que hay como una sensación de nerviosismo”, aceptó el director Todd Phillips.
“Queríamos tomar riesgos, y la pregunta era: qué podíamos hacer que fuera realmente diferente, hacer algo tan sorprendente como lo fue la primera parte”, añadió.
El Joker de Todd Phillips está a años luz del personaje que interpretaba en los años 1960 César Romero en la celebrada serie televisiva que lanzó a Batman al estrellato audiovisual.
La película parece querer acusar a la sociedad de sus propios monstruos, en parte producto de su voyeurismo.
“Las películas tienden a ser vistas como espejos de la sociedad, pero no era esa mi intención”, aseguró el director.
“Joker: Folie à deux” es una de las 21 cintas a concurso en Venecia.