La peor crisis política de la democracia española afronta 24 horas dramáticas en las que el presidente catalán, Carles Puigdemont, decidirá si cede a amenazas y apelaciones de derecha e izquierda, o declarará la independencia como lo exigen sus aliados. El último llamamiento a Puigdemont para que renunciase a la proclamación lo hizo la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, asegurando que ésta pondría en peligro "la cohesión social".Puigdemont, quien de un momento a otro se convirtió en el hombre que dirigió el reclamo de autonomía catalana tendrá una primera oportunidad de proclamar la independencia en su comparecencia ante el Parlamento regional de Cataluña este martes 10 de octubre, desde las 6 de la tarde hora local. El catalán Federico Subirats habló con SEMANA y mencionó lo siguiente: "Llevamos en Cataluña seis años de manifestaciones masivas, pacíficas y democráticas para solicitar una respuesta política la cual no se ha dado".La Asamblea Nacional de Cataluña, a través de un tweet, confirmó la agenda de este martes:
Foto: TwitterPor su parte, el mandatario español Mariano Rajoy, quien se ha caracterizado por su posición conservadora, ha rechazado públicamente la idependencia de Cataluña y cualquier mediación con el gobierno catalán. Mediante una entrevista realizada por el diario El País, Rajoy afirmó que "España no se va a dividir"."La independencia es jurídica y políticamente inviable, por lo tanto, el estado de derecho español y el ordenamiento jurídico y constitucional impediría esta situación", aseguró a SEMANA Alfredo Prada, exconsejero de Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid.En contexto: Cataluña, república invalidaFrente a las supuestas amenazas que Carles Puigdemont ha recibido por parte del gobierno español, Prada aseguró que dichas divulgaciones no son ciertas y que el presidente Rajoy se ha mostrado abierto al diálogo pero no a romper, bajo ningún concepto, la unidad de España.El destino del 16 porciento de la población y el 19 por ciento del PIB conjuntado entre Cataluña y España, estarían en la cuerda floja tras la decisión definitiva. El pasado lunes tres empresas catalanas más la inmobiliaria Colonial, la operadora de autopistas Abertis y su filial de telecomunicaciones Cellnex, anunciaron que trasladaban su sede social de Barcelona a Madrid, con lo que la región perdió seis de sus siete compañías en el índice bursátil español Ibex 35.Sobre la futura crísis económica que tanto España como Cataluña se enfrentarían, Prada explicó lo siguiente: "La independencia lleva directamente a que la hipotética República de Cataluña saldría de la Unión Europea, las consecuencias económicas sumirían a Cataluña en una gravísima crísis económica. La salida masiva de empresas que ya se está produciendo es solo un pequeño botón de muestra de lo que se produciría".Le sugerimos: “Es un salto al vacío”, embajador de España habla de la crisis en su paísCabe recordar que el referéndum de independencia de Cataluña de 2017, es una acción autónoma que determina la separación entre esta comunidad y España. Y que desde el año 2014 se ha estado convocando un referéndum que definiría el futuro político y social de Cataluña. En años pasados, se evidenció la infracción por parte de servidores públicos tomando acciones arbitrarias encontra del voto popular, lo que llevó a su anterior suspención por parte del Tribunal Constitucional.La cuestión actual es si cabe la posibilidad de que Cataluña se logre independizar a pesar del rechazo del referéndum de este mes. Al respecto, Alfredo Prada dijo: "Las anteriores consultas no eran consideradas vinculantes a diferencia de la del pasado 1 de octubre que a pesar de las múltiples irregularidades, falta de transparencia y falta de seguridad jurídica, los actuales gobernantes lo consideran vinculante y conduce directamente a una declaración unilateral de independencia que previsiblemente se hará este martes".*Con información de AFP.