Todo apunta a que el futuro de Neymar se aleja de Barcelona. La joya del fútbol brasileño protagonizará la operación económica más costosa en la historia del fútbol, cuando se complete su traspaso a París Saint Germain (PSG), equipo que ya accedió a pagarle 30 millones de euros por 5 temporadas. El club parisino ahora está a la espera de que el Barcelona decida bajar el valor de la cláusula que asciende a los 220 millones de euros.El delantero estrella de la ‘Canarinha’, que es representado por su padre, tiene entre la espada y la pared al club catalán que deberá cumplir las pretensiones económicas del jugador sino quiere perderlo.El Barca no anda nada afinado. Viene saliendo de una de las peores temporadas que haya tenido recientemente y podría perder uno de los dientes del tridente que lo mantiene todavía en la cima del fútbol europeo.Desde que se jubiló Xavi, Iniesta ha tenido dificultades para llevarse al hombre al equipo y los fichajes fallidos del verano no lo han ayudado a subir su rendimiento. Pero la MSN (Messi-Suárez-Neymar) ha compensado este vacío gracias a un poder ofensivo sin comparación en el viejo continente.Sin embargo, según el periódico francés L‘Equipe está a punto de quebrarse la unión de los tres mosqueteros, frente a las pretensiones de Neymar Jr. de volverse la principal figura del millonario proyecto de Qatar Sport Investment (QSI), el fondo de pensiones dueño del París Saint Germain.De acuerdo con el diario galo, el ex goleador de Santos habría logrado un acuerdo salarial cercano a los 30 millones de euros netos que lo convertirían en el jugador de futbol mejor pagado de la historia, pero todavía quedan por resolver algunas modalidades de su traspaso desde Barcelona.Para evadir las reglas del Fair Play financiero de la UEFA, que no le impide a un club gastar más dinero del que percibe, PSG ha imaginado una compleja operación en la que entregaría al propio Neymar los 220 millones necesarios para pagar la rescisión de los 4 años de contrato que le quedan en el Barca.Pero lo que no previó fue que ese montaje dispararía el precio del jugador, quién tendría que depositar cerca de 300 millones a su antiguo club, en caso de que se le apliquen una carga de 50 por ciento de impuestos propia a las operaciones realizadas por particulares.Por ese motivo es que París está buscando la manera de entregar directamente el dinero a Barcelona sin terciar a través del jugador, aunque tenga que pagar un poco más del valor bruto de la cláusula, como se hizo en el caso del jugador de handball Nicolás Karabatic.Por su parte Neymar se mantiene en silencio, mientras se agita alrededor la burbuja mediática y continúan los rumores sobre el que podría volverse por mucho el mayor traspaso de la historia del deporte rey.