Millonarios volverá este fin de semana a jugar un partido oficial en Bogotá después de casi 3 meses. El conjunto embajador disputó su último juego en noviembre, durante los cuadrangulares finales de la Liga Betplay en los que cayó eliminado a manos del Deportivo Pereira, que días después se coronaría campeón.
En enero organizó la ‘noche embajadora’, sin embargo, sus hinchas ya clamaban por volverlo a ver en competencia. A raíz del Sudamericano SUb-20, los dos equipos de la capital se vieron obligados a aplazar sus partidos de local, por lo que el cuadro azul apenas ha jugado una de las cuatro jornadas disputadas hasta ahora.
El sábado pasado, para rematar, tenía programado el duelo ante el Deportes Tolima en Ibagué, que se vio empañado por la reprochable agresión en contra de Daniel Cataño por parte de un hincha del cuadro pijao que invadió la cancha y lo golpeó por la espalda. El juego se suspendió y se jugará el 29 de marzo a las 8:00 p. m en el Manuel Murillo Toro.
Ya con ese bochornoso caso medianamente resuelto, los dirigidos por Alberto Gamero se pueden enfocar en su regreso a casa, que será este sábado a las 6:20 de la tarde recibiendo a Jaguares por la quinta fecha del campeonato local.
Les ordenan ‘devolver’ la tribuna norte
Este juego de Liga Betplay tendrá un ‘tinte’ especial para los Comandos Azules, una de las dos principales barras de Millonarios, que, finalmente, recuperarán el espacio que tradicionalmente ocuparon en ‘El Campín’. Después de haber conseguido en 2022 el ‘sí' de la comisión encargada, solo restaba que se diera cumplimiento a la venta de boletería para los miembros de la barra.
De ahora en adelante, el conjunto ‘embajador’ tendrá que contemplar el ingreso de los Comandos a la tribuna lateral norte, diciéndo adiós a la bautizada ‘tribuna familiar’, donde solían entrar padres de familia en compañía de sus hijos, en una estrategia de mercado que incluso llevó a reemplazar los asientos de dicha tribuna por unos similares a los que tiene la zona occidental y oriental del estadio.
Aunque la orden ya la habían recibido desde agosto del año pasado, Millonarios se excusó en que ya tenía vendida la boletería para las familias en norte y por ende tenía que garantizarles el ingreso hasta que se acabara el segundo semestre. Con esta nueva decisión, las familias se tendrán que mudar a oriental, donde los precios van desde los 64.000 pesos hasta los 113.000 por persona.
Esta acción, de ubicar a las barras en las tribunas laterales, fue discutida en conjunto con los dos clubes bogotanos en reuniones sostenidas el 25 de enero y 9 de febrero. Otro de los aspectos que quedaron aprobados en el protocolo es que para los partidos en los que se enfrenten los clubes Millonarios, Santa Fe, Atlético Nacional y América de Cali, si no hay restricciones pendientes, las barras que funjan como visitantes en estos partidos deberán tener ubicación en una de las tribunas laterales del estadio.
Lo cierto es que los Comandos, obligados a compartir la tribuna sur con Blue Rain, la otra barra organizada de hinchas azules, fueron regresando progresivamente a la zona que tradicionalmente los identificó desde su creación en el año 1992.
Los Comandos se autoreconocen como la primera barra organizada de Colombia, que dio paso a las demás ya reconocidas a lo largo y ancho del país. Inspirada en los partidos de Argentina que, en ese tiempo (no existía televisión por cable, solo parabólica), transmitía en diferido Señal Colombia –en ese entonces Cadena 3 o Canal 11–. Los Saltarines de Independiente Santa Fe y la barra del Búfalo de Millonarios empezaron a ir al estadio con camisetas y a ver el partido de pie, cantando y saltando los 90 minutos.
La nueva manera de vivir un partido se hizo moda y cautivó a hombres y mujeres de la más diversa condición social, que terminaron por apropiarse de las tribunas laterales, las más baratas en taquilla (en 1992, una boleta costaba 1.200 pesos).
Pero desde 2017 perdieron ese espacio en la tribuna norte a raíz de las constantes denuncias y sanciones que le cayeron a Millonarios por el comportamiento de sus hinchas. Según uno de los líderes de los Comandos, la administración distrital siempre se opuso. “Por seguridad, nos sirve tenerlos en el estadio y no afuera”, dijo en SEMANA al recordar las palabras de los funcionarios en reuniones de seguridad y convivencia.