Luis Díaz vivió un clásico ante Manchester United con todos los aditamentos posibles en Old Trafford. El extremo de Liverpool anotó uno de los goles del juego, destacó por una pelea con el defensa rival Harry Maguire y también, fue exaltado por su afición que, a pesar de estar de visita, se hizo sentir con sus cánticos.
Uno que llamó poderosamente la atención, fue el que se hizo viral a través de redes sociales y un día después, difundieron las redes sociales del conjunto ‘red’, donde se escucha cantar a todo pulmón a los aficionados: “Luis Díaz, es de Barrancas y juega en el Liverpool...”.
Dicho cántico no es la primera vez que es escuchado, ni tampoco es el único que le han compuesto al colombiano desde su arribo al club. En sus primeros juegos, se recuerda cuando su impacto fue de tal magnitud, que le hicieron otra pieza musical con la pista de la reconocida canción Bella Ciao.
Gracias a la serie La Casa de Papel, los hinchas compusieron una canción que celebra los logros y el talento de Díaz. La letra, traducida al español, dice así: “Su nombre es Lucho. Vino del Porto. Vino a marcar, vino a marcar. Vino a anotar, anotar, anotar. Él es Luis Díaz. Él es de Barrancas y juega en el Liverpool”.
Díaz se le paró a Maguire
Hacia el cierre del juego en Old Trafford y con la frustración a flor de piel por parte de Luis Díaz tras estar cediendo puntos en la lucha por la Premier League, al colombiano se le vio tener un duro cara a cara con el inglés Harry Maguire, con quien quedó entrelazado tras la disputa de un balón.
Ambos, en procura de hacerse con la esférica, fueron a uno de los costados del ‘Teatro de los Sueños’, donde el inglés usó fuerza desmedida en contra del guajiro, a tal punto que lo molestó e hizo que este le contestase. En primera medida, el suramericano le mandó un manotazo al europeo para quitárselo de encima.
Segundos después, tras un cruce de miradas desafiantes, empezaron a decirse palabras de grueso calibre. Entre esas, en cámara quedó evidenciada la que le dijo Maguire a Díaz: “Shithouse”. De espalda a la grabación, no se pudo saber cuál fue la respuesta del colombiano a dicho insulto.
En busca de que la situación no trascendiera a mayores, uno de los compañeros del central inglés llegó a poner la mano encima del pecho de Díaz, en busca de que este se calmase y se le diera continuidad al juego. Al final, nada pasó a mayores, pero sí mostró el carácter del colombiano para no dejarse intimidar.