La esperanza de tener los Juegos Panamericanos 2027 en Barranquilla todavía no se apaga. A pesar de la decisión de Panam Sports por no recibir el dinero acordado con el Gobierno colombiano, la decisión de la nueva sede aún depende de una revisión de los 41 países pertenecientes a la organización.
Aunque la capital del Atlántico tiene pocos argumentos para soñar con que le devuelvan la elección, desde el Gobierno nacional y el Ministerio del Deporte se están haciendo gestiones para intentar conciliar con el presidente de Panam Sports, Neven Ilic, quien fue el que mandó la carta firmada en la que se anunciaba la pérdida del rótulo de anfitrión.
En el mes de febrero se realizará una asamblea extraordinaria con los 41 países miembro, donde se definirá si Barranquilla recibe una segunda oportunidad o alguna de las candidatas que ha levantado la mano se queda con el honor de organizar las justas.
El encargado de confirmar esa última oportunidad fue Ciro Solano, presidente del Comité Olímpico Colombiano (COC), quien tiene comunicación directa con Panam Sports, al ser el organismo al que están inscritos todos los comités olímpicos del continente.
Esto no quiere decir que Colombia ya pueda empezar a sentirse de nuevo como organizador, sino que debe presentar un proyecto mucho más serio en el que no deje lugar a dudas en aspectos económicos o administrativos.
“Estatutariamente, la asamblea soberana tiene la responsabilidad de adjudicar de forma definitiva la sede. Este primer paso que dio el ejecutivo de Panam Sports (Neven Illic) de quitarnos la sede lo debe llevar a una asamblea extraordinaria”, explicó Solano en Caracol Radio.
El presidente del COC visualiza esto como “una esperanza para que a Barranquilla se le puedan devolver los juegos o, de lo contrario, la asamblea ratifique la decisión del ejecutivo”.
¿Por qué le quitaron la sede a Barranquilla?
Si el Ministerio del Deporte logra revertir la decisión de Panam Sports, sería una victoria para el deporte colombiano, que se ha manifestado en contra de los errores que se cometieron en los últimos meses y que desencadenaron la decisión comunicada por Ilic el pasado miércoles.
Una vez que la capital atlanticense fue designada como sede, el compromiso del Gobierno nacional era pagar un total de ocho millones de dólares a Panam Sports, repartidos en dos plazos de pago por cuatro millones cada uno.
Otras opciones
Colombia no cumplió los tiempos establecidos por la organización con sede principal en Miami y provocó dudas entre los directivos, que incluso ya estarían evaluando otras opciones para celebrar las justas si Barranquilla finalmente es retirada.
Las reacciones no paran
La ministra Astrid Rodríguez y distintos dirigentes del deporte en Colombia se han pronunciado, pero ninguno ha querido asumir la responsabilidad en este hecho, que perjudica el nombramiento del país para próximos eventos de este tipo.
Ante lo sucedido, la doble medallista olímpica Mariana Pajón levantó su voz y pidió que se haga todo lo posible para recuperar la sede de los Panamericanos. “Perdemos todos”, dijo la ciclista antioqueña.
“Perdemos visibilidad internacional, perdemos posibilidad de ingresos para sectores turísticos y economías locales, perdemos en adecuación y construcción de escenarios deportivos para nuevas generaciones, perdemos fogueo internacional para muchos atletas, perdemos credibilidad internacional, perdemos la posibilidad de mostrar lo mejor de Colombia, perdemos posibilidad de empleo e impacto social, perdemos la posibilidad de unir a muchos colombianos en una causa, perdemos futuro”, sentenció en un video en sus redes sociales.
“Invito a todos a recuperar esa naturaleza del deporte: esa unión a través del TRABAJO EN EQUIPO, no es momento de rasgar vestiduras y tirarse el agua sucia, es momento de remontar, para eso todos (deportistas, dirigentes deportivos, medios, empresarios, gobierno nacional y gobiernos locales, Panam Sports, etc.) debemos sentarnos y buscar una salida para recuperar la sede: ¡los Juegos Panamericanos 2027 tienen que ser en Colombia!”, recalcó.