Guinea, que el miércoles había anunciado que renunciaba a enviar a su pequeña delegación de cinco deportistas a los Juegos Olímpicos de Tokio debido a la pandemia, reconsideró su posición este jueves y finalmente sí tendrá representación en la capital japonesa.
Después de analizar la situación, y con un mejor panorama sobre la justa multideportiva, la República de Guinea confirmó que su delegación sí viajará. “El gobierno, después de recibir garantías de las autoridades sanitarias, da su consentimiento para que nuestros atletas participen”, señaló en un comunicado el ministro de Deportes, Sanoussy Bantama Sow.
El ministro precisó que tiene “la seguridad por parte de las autoridades japonesas y de la embajada de Guinea en Japón sobre todas las disposiciones sanitarias que se tomarán para proteger a la delegación guineana”, en una declaración a la AFP.
Conakry había anunciado el miércoles que debido “al recrudecimiento de las variantes del covid-19 y para preservar la salud de los deportistas guineanos se decidió la anulación de la participación en lo Juegos”, en una carta del ministro de Deportes enviada al presidente del Comité Olímpico Guineano que pudo consultar la AFP.
El ministro rechazó este jueves los problemas económicos alegados para justificar la renuncia a los Juegos de este país humilde del oeste de África.
Guinea, que no logró una sola medalla en sus 11 participaciones en los Juegos Olímpicos, debía enviar a Tokio a Fatoumata Yarie Camara (lucha libre), Mamadou Samba Bah (judo), Fatoumata Lamarana Touré y Mamadou Tahirou Bah (natación) y a Aïssata Deen Conté (atletismo, 100 m femeninos).
Último escándalo en Tokio 2020
Tokio-2020 se pone en marcha un año después. La ceremonia de apertura del viernes en la capital japonesa estará llena de simbolismo. El movimiento olímpico podrá celebrar unos Juegos que la covid-19 puso en peligro. Un evento que ya ha comenzado con el sóftbol y el fútbol.
Pero los Juegos tuvieron un último susto en la víspera de su inauguración. El responsable de la ceremonia de apertura, Kentaro Kobayashi, fue destituido este jueves de su cargo por una broma referida al Holocausto realizada hace dos décadas, en el último episodio de polémica que está viviendo el evento.
“Nos hemos enterado que durante un espectáculo en el pasado, utilizó un lenguaje burlesco al referirse a este trágico episodio del pasado”, declaró la máxima responsable de Tokio-2020, Seiko Hashimoto, por lo que se decidió “el cese en sus funciones de Kobayashi”.
La polémica escena, grabada en video en 1998, muestra a Kobayashi y a otro actor fingir ser unos famosos comediantes infantiles de la televisión nipona.
En un momento dado, Kobayashi se refiere a unos muñecos de papel como “esos que la última vez dijiste: ‘¡Vamos a jugar al Holocausto!’”, provocando la risa de la audiencia.
La pareja bromea también sobre el enojo que provocaría esta referencia al Holocausto a su productor televisivo. El vídeo salió a la luz durante la madrugada del jueves, provocando una gran conmoción.
Con información de la AFP.