Camilo Villegas cerró su temporada 2023 con una soñada victoria en el Bermuda Championship, cerrando así una sequía de nueve años consecutivos sin ganar en el PGA Tour.
Más allá de lo que significó la victoria económica y deportivamente, para el golfista colombiano tuvo un ‘tinte’ especial por la dedicatoria a Mía, su pequeña hija que falleció en el 2020 luego de una dura batalla contra el cáncer.
En un emocionante final, con el público a su favor, Villegas elló su sexto birdie de la jornada gracias a un formidable golpe de aproximación desde el búnker en el hoyo 17. Esa acción le concedió la ventaja definitiva de dos golpes sobre el sueco Alex Noren, quien había sido su rival directo durante todo el fin de semana.
Este triunfo le garantiza al colombiano el estatus en PGA hasta 2025 y su participación en el Masters de Augusta, el Campeonato de la PGA y el Players Championship del año que viene.
Luego de lanzar su último golpe, el colombiano miró hacia el cielo y dejó una tierna imagen que rápidamente fue relacionada con la pérdida que sacudió a su familia hace tres años.
Casi un mes después de aquella conquista, el antioqueño abrió su corazón y reveló lo que aquel día le dijo a Mía mientras miraba al cielo. “Es curioso. En realidad le di las gracias. Finalmente meto el hoyo y vuelvo a mirar arriba y le dijo ‘gracias de nuevo’. Fue bonito”, declaró en entrevista con Eva Rey.
El golfista confesó que ya tenía pensando cómo sería el momento. “Me recuerda a un amigo mío, Gary Woodland, que perdió un bebé también y me acuerdo cuando él ganó en Phoenix y miró al cielo. Esa mirada, desde que perdí a Mía, siempre quise hacerla y bueno en Bermuda se nos dio la oportunidad”, señaló.
Luego de mencionar esa anécdota, Villegas rompió en llanto y tuvo que tomar un segundo para secarse una lágrima que se le salió al recordar a su pequeña, parecido a lo que le sucedió segundos después de consagrarse campeón en Bermuda, cuando le preguntaron si efectivamente la dedicatoria había sido para ella.
El deportista de 41 años aseguró que el duelo ya ha pasado y ahora es una compañía que lo ayuda a encarar los retos de su carrera. “No pienso así. Lo que pasó, pasó. Después de una batalla dura, Mía está donde tiene que estar”, declaró.
“Cuando la quimioterapia ya no estaba funcionando, me acuerdo que el médico nos está hablando y Mía empieza a convulsionar. Después de eso dije ‘Mía no tienes que seguir luchando si eso es lo que sientes y si estás tranquila, descansa...’. Y bueno, terminó como terminó, yo creo que ella ya estaba cansada y, por lo tanto, no está físicamente con nosotros, pero siempre está en nuestros corazones”, agregó.
En honor a la memoria de su hija, el colombiano creó una fundación con la que ayuda a los niños que pasan por una enfermedad similar. “Nosotros vivimos esa experiencia de cinco meses bien vividos, con el apoyo del hospital, nos ayudaron con los contactos y nos trataron 1A. Establecimos buena relación con las enfermeras, era todo muy bacano”, señaló.
“Mientras Mía batallaba pensábamos en el nombre porque no queríamos que se volviera una carga para ella con la esperanza de que ganara la batalla. Cuando pierde la batalla, fue muy claro que el nombre sería Mia’s Miracles y yo creo que va más allá de sentir la responsabilidad de tenerlo que hacer, es quererlo hacer. Cuando sentimos que lo tenemos que hacer yo creo que no tiene ese cariño y ese amor que hay detrás de Mia’s Miracles”, completó.