Carlos Queiroz, extécnico de la Selección Colombia, entró en polémica con el exfutbolista y ahora directivo de la Fifa Jurgen Klinsmann, a raíz de unas declaraciones del alemán para la BBC en las que habla de la “cultura” de los iraníes y sugiere que manipularon al árbitro para conseguir la victoria sobre Gales el pasado viernes.

“Carlos encaja muy bien con la selección nacional y su cultura, fracasó en Sudamérica con Colombia y luego no clasificó con Egipto, y llegó justo antes de la Copa del Mundo con Irán”, arrancó la intervención de Klinsmann en la televisión británica.

Para el alemán esa supuesta manipulación es un aspecto cultural de los iraníes y en su ejemplo incluyó también otros países como Honduras, Costa Rica y Guatemala, lugar de origen del árbitro que dirigió dicho partido. “No es casualidad, es parte de su cultura, cómo juegan. Trabajaban el árbitro. Trabajan el juez de línea y el cuarto árbitro, están constantemente al oído. Hubo muchos incidentes que no vimos. Esta es su cultura, te sacan de tu juego”, agregó.

Esa opinión no cayó nada bien al interior del conjunto asiático, que reaccionó a través de su entrenador. “Tomaste la iniciativa de llamarme Carlos, así que creo que es correcto llamarte Jurgen. ¿Correcto?”, inicia la carta abierta de Queiroz, a través de su cuenta de Twitter, en la que es bastante activo a pesar de estar en plena competencia.

“Incluso sin conocerme personalmente, cuestionas mi carácter con un típico prejuicio de superioridad”, lanzó el técnico portugués, cuestionando de manera directa a su colega, que hoy hacer parte del grupo de estudio técnico de la Fifa, liderado por el también entrenador Arsene Wenger.

Queiroz reprobó los comentarios de Klinsmann y lo invitó a conocer la entraña de la selección iraní. “No importa cuánto pueda respetar lo que hiciste dentro del campo, esos comentarios sobre la cultura de Irán, la selección de Irán y mis jugadores son una vergüenza para el fútbol. Nadie puede herir nuestra integridad si no está a nuestro nivel, por supuesto”, arremetió.

“Aún así, nos gustaría invitarlo a venir a nuestro Campamento del Equipo Nacional, socializar con los jugadores de Irán y aprender de ellos sobre el País, la gente de Irán, los poetas y el arte, el álgebra, toda la cultura persa y también escuchar de nuestros jugadores cuánto aman y respetan el fútbol”, agregó en otro de los trinos que conforman el hilo.

Para Queiroz, la opinión de Klinsmann está salida de lugar y no corresponde a una persona de tanta experiencia en el fútbol. “Como estadounidense/alemán, entendemos su falta de apoyo. No hay problema. Y a pesar de sus escandalosos comentarios en la BBC que intentan socavar nuestros esfuerzos, sacrificios y habilidades, prometemos que no emitiremos ningún juicio sobre tu cultura, raíces y antecedentes y que siempre serás bienvenido a nuestra familia”, agregó.

La invitación del portugués a visitar el lugar de entrenamiento de Irán en Qatar 2022 cerró con la exigencia de la renuncia a su cargo como directivo de la Fifa. “Solo queremos seguir con toda atención cuál será la decisión de la Fifa con respecto a su posición como miembro del Grupo de Estudio Técnico de Qatar 2022. Porque, obviamente, esperamos que renuncies antes de visitar nuestro campamento”, sentenció Queiroz.

Este nuevo escándalo se suma la lista de críticas que ha recibido el organismo internacional a raíz del nombramiento de Qatar como sede de la Copa del Mundo. La lucha contra la discriminación es una de las principales iniciativas que adelanta la Fifa para este Mundial, razón de peso para que la protesta de Queiroz sea escuchada por los altos mandos, incluido el presidente Gianni Infantino.