Uno de los grandes del continente, Manchester United, y el actual campeón de la Europa League, Sevilla, se jugarán este miércoles la última oportunidad de seguir aspirando a los cruces, en una jornada en la que otros favoritos al título como Real Madrid y Bayern Múnich afrontan con los deberes hechos.
En los ocho partidos que lleva como técnico del Sevilla, desde que llegó a la capital andaluza a mediados de octubre, el balance del técnico uruguayo Diego Alonso no puede ser más pobre: cuatro empates y una derrota en LaLiga y dos partidos perdidos en Champions. La única victoria fue en la primera eliminatoria de la Copa del Rey, 3-0 ante el Quintanar, de la sexta categoría del fútbol español.
En Europa, con dos puntos tras cuatro jornadas, el recorrido del Sevilla parece abocado al fiasco. Contra el PSV Eindhoven, en el Sánchez Pizjuán, los hispalenses tienen una última oportunidad de reengancharse a la pelea por clasificarse a octavos.
El Sevilla, colista de la llave B, necesita la victoria para depender de sí mismo y no estar pendiente del Feyenoord y Lens (ambos con 5 puntos).
El miércoles, el Arsenal podría cerrar su pase a octavos puntuando contra el Lens, e incluso asegurar la primera posición si empata o gana, y el PSV no logra los tres puntos en Sevilla, que de perder se despediría de Europa esta temporada, lo que originaría una crisis de proporciones desconocidas, al estar inmerso en LaLiga en la pelea por no descender (15º).
“Necesitamos una victoria. El equipo está dolido. Da lo que tiene que dar y no tiene recompensa. Lo que no podemos hacer es aflojar. Hay que redoblar la apuesta porque la recompensa va a venir”, aseguró Alonso el sábado tras perder contra la Real Sociedad (2-1).
El Manchester United (4º, 3 puntos) tiene un complicado y decisivo desplazamiento a Estambul, para enfrentarse al Galatasaray (3º, 4 puntos).
La derrota dejaría a los Diablos Rojos eliminados de la Champions y en situación complicada para disputar siquiera el puesto de play-off a Europa League.
El empate, si bien no eliminaría al equipo de Erik ten Hag, también dejaría muy tocadas sus opciones, teniendo que enfrentarse en la última jornada al Bayern Múnich, que ya tiene los deberes hechos.
Los bávaros, ya clasificados como primeros de grupo, buscarán el miércoles contra el Copenhague alargar su racha de 17 victorias en fase de grupos de Liga de Campeones.
El Real Madrid, ya clasificado a octavos, recibe al Nápoles (2º, 7 puntos) de Walter Mazzarri necesitado tan solo de un empate para asegurar la primera posición del grupo C.
Por su parte, los italianos, que vencieron en Serie A durante el regreso de Mazzarri al banquillo luego del despido de Rudi Garcia, asegurarán el pase a octavos en caso de victoria. El empate también les serviría siempre y cuando el Braga (3º, 2 puntos) no gane al colista Unión Berlín (1 punto), que estrenará nuevo entrenador, el croata Nenad Bjelica, llamado para salvar a un equipo en implosión, que no gana desde agosto y que en sus últimos 15 partidos suma trece derrotas y dos empates.
Con la Real Sociedad y el Inter de Milán ya en octavos y el duelo entre ambos equipos previsto en la última jornada, esta quinta fecha de la llave D no dejará decidida ni la pelea por la primera posición ni la plaza de acceso al play-off de Europa League.
Sin embargo, los de Imanol Alguacil están obligados a igualar o mejorar en su recepción del Salzburgo (3º, 3 puntos) lo que hagan los Nerazzurri en Lisboa ante el Benfica (colista, 0 puntos), para llegar a esa última y decisiva fecha en condiciones óptimas para asegurar la primera posición de la llave D.
*Con información de la AFP.