El decimocuarto título de Rafael Nadal en Roland Garros también tiene sus detractores, mucho más después de las declaraciones en las que el español admitió haberse infiltrado para reducir del dolor en su pie izquierdo y poder jugar al máximo nivel en su grand slam favorito.
Después de la contundente victoria sobre Casper Ruud (6-3, 6-3 y 6-0), Nadal habló en rueda de prensa respecto de su condición física y el tratamiento que eligió junto a su equipo para disputar el torneo francés. “Con las circunstancias en las que estoy jugando no quiero y no puedo seguir. Voy a seguir tratando de buscar una solución y una mejora a lo que sucede”, dijo.
A pesar que las inyecciones fueron un éxito, al menos para permitirle jugar durante dos semanas seguidas, Nadal manifestó que no piensa volver a hacerlo y buscará otras soluciones médicas. “He sido capaz de jugar con infiltraciones en el nervio para dormir el pie. Es un gran riesgo. Juego sin dolor, pero también con cero sensación”, declaró.
Esta semana estará practicando un nuevo tratamiento que consiste en “una inyección de radiofrecuencia en el nervio” para disminuir el dolor que le produce desde 2005 el síndrome de Müller-Weis con el que fue diagnosticado. Esta enfermedad, que no tiene cura, le genera una alteración en el hueso del pie izquierdo que se hace más compleja con el paso de los años.
Discusión abierta
El español se llevó todos los aplausos el domingo al conquistar su título de grand slam número 22, dos más que Roger Federer y Novak Djokovic, pero también hay quienes le bajaron la caña a su gesta deportiva e incluso lo acusaron de haber incurrido en normas prohibidas en otros deportes como el ciclismo.
“Los héroes de hoy en día”, escribió el ciclista francés Thibaut Pinot en su cuenta de Twitter, ironizando sobre los comentarios de quienes celebraban el gran esfuerzo de Nadal para sobreponerse a su enfermedad y ganar una vez más Roland Garros.
Este lunes el corredor del Groupama-FDJ volvió a referirse al tema con un par de retuits en los que cuestiona el ejemplo que está dando Nadal a los más jóvenes, que incluso podrían poner en riesgo su salud física con el objetivo de lograr los objetivos profesionales.
La crítica desde el ciclismo está centrada en que este tipo de inyecciones analgésicas están prohibidas por parte de la UCI, argumento que remarcó otro francés, Guillaume Martin, en declaraciones para L’Equipe. “Si estás enfermo o lesionado, no corres, no compites, eso tiene sentido para mí”, analizó.
“A largo plazo, no estoy seguro de que le vaya bien al tobillo de Nadal. Además, los medicamentos, y especialmente las inyecciones, no solo tienen un efecto curativo, ciertamente pueden tener efectos en el rendimiento o modificarse para mejorar el rendimiento, por lo que me parece que están en el límite”, acotó el corredor del Cofidis.
En el concepto de Martin, este tipo de decisiones deberían ser revisadas detenidamente por las autoridades del tenis para determinar si el español se vio beneficiado con las inyecciones que le aplicaron más allá de la ausencia del dolor. “Pasan por héroes porque dicen que soportan el dolor, pero en realidad se valen de sustancias para aguantarlo y creo que eso está muy al límite. En ciclismo, en particular el Tour, aunque no haya hecho nada, pudo ser acusado sistemáticamente de dopaje”, añadió.
Nadal aún no ha emitido ninguna respuesta al respecto de las acusaciones de los ciclistas, pero en incontables ocasiones ha manifestado que continúa en el deporte porque es lo que ama hacer, aun cuando días después de disputar un torneo termina cojeando y con dolores insoportables en el pie izquierdo.