Desde que se estableció que Boca Juniors y River Plate se iban a enfrentar en la final de la Copa Libertadores, se sabía que iba a ser un partido de máxima tensión y que podría haber incidentes. El primer hecho grave relacionado con el encuentro se presentó este sábado cuando Boca Juniors llegó al Estadio Monumental. El equipo xeneize fue recibido con piedras y gas pimienta generando caos en su entrada al estadio. Para controlar la situación la Policía debió lanzar gas lacrimógeno a los fanáticos millonarios que estaban a las afueras del escenario. Este fue el momento de la agresión:
Varios jugadores sufrieron los efectos de la situación. Carlos Tévez lució como uno de los más afectados.
"Nos tiraron de todo", dijo Carlos Izquierdoz, jugador de Boca.
El exdirigente Juan Carlos Crespi, quien también estaba en el bus, explicó: "Nos tiraron gas pimienta, piedras, de todo". Además señaló que hay preocupación en el club por esta situación y lo que podría pasar en el partido. Ahora, los dirigentes de Boca pidieron que los médicos revisen a los jugadores para ver si están aptos para disputar el partido, que ahora está en riesgo. A las afueras del Monumental los hinchas se siguen enfrentando con la Policía.