La tercera semana de Cristiano Ronaldo en el Mundial de Qatar 2022 ha estado marcada por una ola de escándalos que intentan explicar su relación con el cuerpo técnico y el resto de jugadores. Primero, hizo gestos de desaprobación contra el cambio de su técnico ante Corea del Sur, luego se mostró molesto por iniciar desde el banquillo contra Suiza y ahora se rehusó a entrenar con los suplentes, de acuerdo a lo que reportaron este miércoles desde Doha.
Javier Estepa, enviado especial del diario Marca, comentó que este miércoles hubo movimiento en la sede de entrenamiento de Portugal con la sonada ausencia de Cristiano en la sesión programada para aquellos futbolistas que no fueron de la partida en octavos de final. “Entre ellos no estaba Cristiano Ronaldo y ha decidido no saltar al terreno de juego. Prefirió quedarse en el gimnasio con los titulares”, informó el periodista español.
La noticia ya ha sido replicada por medios portugueses como A Bola, que en su editorial de pospartido lo califica como “héroe imperfecto”, por la cantidad de escándalos que han empañado su presencia con la selección en Qatar.
Y es que en torno a Portugal se ha hablado más de la salida de Cristiano del Manchester United que de la espectacular presentación en los dos primeros partidos y la fase de octavos de final. Aunque el propio astro salió a pedir que no usaran las ruedas de prensa para hablar de él, la prensa ha hecho caso omiso y lo ha hecho protagonista de infinidad de portadas alrededor del planeta.
Era pos-Cristiano
La sonora victoria de Portugal, que eliminó a Suiza 6-1 en octavos de final del Mundial de Qatar el martes, marca el inicio de una nueva era para el fútbol de ese país, la del después de Cristiano Ronaldo, reaccionó la prensa lusa este miércoles.
Suplente el martes en el estadio de Lusail, el cinco veces Balón de Oro, de 37 años, elogió la “exhibición de lujo de un equipo lleno de talento y juventud”, en la que ya no tiene el papel protagonista, pese a la atención dada a sus récords personales y lo que ocurre con su carrera.
“Jornada increíble para Portugal, con un resultado histórico en el mayor escenario del fútbol mundial. (...) ¡El sueño sigue vivo! ¡Hasta el final!”, escribió en sus redes sociales, el líder de la Seleçao desde hace una quincena de años.
Pero al día siguiente del triplete marcado por su sustituto Gonçalo Ramos, delantero de 21 años del Benfica que aún no había sido titular, el título del rotativo deportivo Record es rotundo: “Inicio de una era: la pos-Ronaldo”.
“La estrella del equipo fue el (gran) equipo”, resumió su competidor A Bola, mientras que el diario de referencia Público subraya en primera que “Portugal se rinde a la juventud”. Según O Jogo, rotativo deportivo de Oporto, “la selección asume su candidatura al título (de campeón mundial) con un rendimiento colectivo de otro planeta”.
Los comentaristas también destacan la apuesta ganadora del seleccionador Fernando Santos, que había llamado al orden a Cristiano por mostrar su enfado tras ser sustituido a la hora de juego contra Corea del Sur en la fase de grupos.
El entrenador portugués afirmó que no poner a Cristiano de titular había sido “una elección estratégica”, y no una sanción contra su capitán, pero la prensa ha visto en ello, no obstante, “un golpe sobre la mesa” del seleccionador, de 68 años. “Por fin hemos sentido que había disciplina en el seno de la selección, un liderazgo de Fernando Santos”, afirmó en su comentario, el subdirector de Record, Vitor Pinto.
Desde el inicio de la concentración de Portugal hace tres semanas, la situación personal de Cristiano Ronaldo había impregnado la preparación y el recorrido de su equipo en el Mundial de Qatar. Tras su divorcio del Manchester United, la atención está ahora sobre sus supuestos contactos con el Al-Nassr. Preguntado sobre esto el martes cuando pasaba por la zona mixta, el interesado solo dijo “no, no es verdad”, sin pararse.
Pero hará falta algo más que esta escueta contestación a una cuestión ambigua para que la incertidumbre sobre el futuro de esta estrella planetaria deje por completo de pesar sobre el de su selección.
*Con información de AFP.