El guardián del arco de la selección Colombia y Al-Nassr brilló este viernes 6 de enero en la fecha 12 de la Liga Profesional Saudí, luego de realizar un destacado papel en su pórtico, en donde logró la puntuación más alta de su equipo con un puntaje total de 8.9 puntos.
David Ospina cumplió tanto en defensa como en ataque, luego que para el segundo gol de su onceno pudiera dar la asistencia que permitió al atacante Talisca marcar el doblete del día para su cuenta personal, ese mismo con el que ganaron ante Al Ta’ee y con el que llegaron al liderato del torneo con 29 puntos.
Sobre los 46 minutos de juego, cuando el partido ya se encontraba 1-0 a favor, el portero colombiano recogió una pelota en su propio arco, la puso en el suelo y la lanzó directo al campo rival, habilitando al delantero brasileño Anderson Talisca, que solo tuvo que definir para marcar el segundo del partido frente al visitante, séptimo clasificado de la liga saudí.
Aunque el tanto fue de Talisca, todos los focos se fueron hacia Ospina. Sus compañeros se le lanzaron encima en ‘montonera’ y lo felicitaron por la espectacular jugada que acabó siendo la segunda y lapidaria anotación del partido.
Cuando la celebración terminó, el guardameta antioqueño se levantó con ayuda de Luiz Gustavo y levantó el puño hacia el cielo, señalando al banquillo, desde donde también le cayeron aplausos por la milimétrica asistencia. Talisca, el autor del tanto, incluso se cruzó toda la cancha para celebrar con su asistidor, chocando las manos y dándose un abrazo antes de ubicarse en el centro del campo para el reinicio del juego.
A la par de esta imagen en la que el colombiano fue la gran figura, las cámaras también estuvieron apuntando a cómo la nueva perla del equipo, Cristiano Ronaldo, seguía las acciones del juego. Una grabación exclusiva que rondó rápidamente por las redes sociales, permitió ver que mientras se producía la acción del segundo tanto, el luso se encontraba al interior del camerino del estadio sin camiseta y montado en una bicicleta, en donde no perdía el tiempo porqué mientras veía el juego pedaleaba para mover su cuerpo en busca de no perder la forma deportiva.
Sin embargo, lo que más generó relevancia fue su reacción ante el tanto en el que Ospina fue el gran asistidor, pues antes de consumarse el remate que terminó en gol, CR7 ya estaba expectante de cómo terminaría la acción y una vez tuvo desenlace positivo para los suyos, alzó los brazos para aplaudir la magistral jugada que se había gestado entre los sudamericanos. Siendo el jugador el foco más importante de la escena, a su alrededor también estaban colaboradores de Al-Nassr que se alegraron junto a él por el tanto definitivo de la victoria.
¿Por qué no debutó Cristiano Ronaldo?
Cabe recordar que en la liga de Arabia permiten más extranjeros que en Colombia. En total son ocho los cupos disponibles para cualquier equipo de primera división. El problema es que, antes de fichar a Cristiano, el Al-Nassr ya tenía todos esos cupos llenos y, por tanto, tiene que buscar la salida de un jugador para poder incluir al portugués. De momento, Cristiano no aparece en la lista de inscritos del conjunto amarillo.
Además de los cupos de extranjero, Cristiano acarrea una sanción por agredir a un niño en el partido entre Manchester United y Everton (0-1) disputado en el mes de abril en Goodison Park. Después de la derrota ante los Toffees, un fanático se encontraba cerca del túnel de entrada filmando el paso de los jugadores, cuando el luso, de un golpe certero con su mano derecha, tiró al suelo su celular, siguiendo su camino hacia al vestuario.
Aunque Cristiano envió disculpas a la madre del hincha del Everton, la acción no quedó impune y entró a investigación de la Federación Inglesa (FA) que, casi siete meses más tarde, decidió imponerle una sanción de dos partidos locales sin jugar.
Al margen que CR7 se mudó a Arabia Saudita después de terminar su contrato con el United, este viernes se confirmó de manera oficial que la sanción sigue activa al tratarse de una conducta antideportiva y no algo que sucedió durante los 90 minutos del encuentro, que, en ese caso, sí deberían cumplirse en la competencia donde se dio.