“Un campeón que decidió no rendirse jamás”, así es como el deportista venezolano Rubén Limardo Gascón se describe a sí mismo en una publicación con la que ha sorprendido a miles de personas en Twitter. En la misma, se le ve montado en su bicicleta, con ropa deportiva y una maleta de Uber Eats en la espalda, listo para salir a trabajar aunque no sea en lo que sabe y le apasiona hacer: la esgrima.

Su nombre comenzó a ser reconocido luego de que se convirtiera en el único esgrimista en conseguirle una medalla de oro a Venezuela en los Juegos Olímpicos de Londres 2012; además, ha ganado varias medallas en distintas competencias tanto a nivel nacional e internacional, entre las que más destacan dos medallas de plata en el Campeonato Mundial de Esgrima (2013 y 2018) y cuatro oros en los Juegos Panamericanos.

No obstante, y a diferencia de lo que muchos piensan, el deporte no le es suficiente a Rubén Limardo Gascón para generar ingresos y, con ellos, poder sostener a su familia. Por ese motivo, a sus 35 años tomó una rotunda decisión pensando en “ganarse la vida” y afrontar las dificultades que ha atravesado por cuenta de la crisis en su país, la pandemia de coronavirus y el perseguir sus sueños.

“Como muchos de mis compañeros atletas, mis hermanos y yo hemos tenido también que buscar una alternativa para generar ingresos”, precisó el atleta.

En sus redes sociales, el venezolano contó que desde hace 19 años vive en Polonia y que desde hace 5 se convirtió en padre de familia, lo que le hace tener muchas más responsabilidades que antes. Es por ello que además del deporte tiene un segundo trabajo: como repartidor de Uber Eats en la ciudad donde vive, Lodz.

Rubén Limardo Gascón aseguró que no por ello dejará la esgrima; al contrario, confirmó que no ha dejado ni un solo día de entrenar y prepararse, solo que no podía “sentarse a esperar" los recursos económicos que gana por su labor de atleta, que en este momento sigue siendo difícil debido a las restricciones que han impuesto las autoridades a nivel mundial por cuenta de la crisis sanitaria por la covid-19.

“Por primera vez a mis 35 años estoy dedicado también a algo que no es solamente el deporte y que eso me llena de satisfacción. Para quienes creen que algunos tenemos “privilegios” por los resultados, déjenme decirles que no es así”, escribió el esgrimista en su Twitter.

Así, con orgullo y determinación, dio a conocer su testimonio en internet y ha recibido miles de mensajes positivos, de admiración e inspiración, además de que ha despertado la solidaridad no solo de los venezolanos, sino también de la región y del mundo entero.

Aunque en la fotografía que compartió en la publicación se le ve medio rostro cubierto por el tapabocas, la expresión de la mirada de Rubén Limardo Gascón da cuenta de su fortaleza y confianza en sí mismo en este momento. El mensaje que ha enviado no es otro diferente sobre el valor y la importancia de ajustarse a los cambios abruptos de la vida.

“Yo, la última medalla de oro olímpica de Venezuela, también salgo a la calle a trabajar todos los días para ir de la mano por los sueños que aún me quedan por cumplir. Ajustarse a los cambios es definitivamente un trabajo para valientes”, dijo el venezolano.