En las cuentas de pocos estaba que Ceiber Ávila cayera en los cuartos de final de la categoría de los 53 a 57 kilogramos con el ghanés Samuel Takyi, pero así pasó.

Aunque el combate fue muy parejo, con un marcador final en las tarjetas de los jueces de 3 a 2, el nacido en San Pedro de Urabá no logró conseguir cupo por una medalla para Colombia y al final evidenció su tristeza por el resultado.

“Uno como deportista se propone muchas cosas y entre esas está el rendimiento que es y después de lo que nos pasó en Rio, pues se sabe que queríamos rescatar eso que nos arrebataron. Decepcioné a todo un pueblo, un país, mis entrenadores y todos. Sobra darles el agradecimiento a todos y ver qué pasa conmigo”, dijo con gran tristeza el boxeador que se despide de las justas a sus 32 años.

“Sí fue bastante complicado el combate, el muchacho siempre iba pa´ lante y nunca paró, y la verdad sí. La primera la gané, la segunda lo perdí y el tercero no me alcanzó”, dijo Ceiber al canal Caracol al final de la competencia.

Ceiber dominó el primer asalto, perdió el segundo y en el tercero se sentenció su derrota. 29-28 votaron tres jueces por Takyi y dos por Ávila. El colombiano aceptó que el cansancio se sintió y por eso fue de más a menos en el round: “La verdad siempre se sintió un poco el agotamiento, hicimos la buena preparación con buenas cargas, pero al final se sentía el cansancio, el agotamiento. No es culpa ni del profe, ni de los profes, ni de nadie. Eso lo presenté yo en mi cuerpo, el agotamiento. Mi cuerpo lo refleja y me tocó quedarme aquí sentado, aunque hicimos un gran trabajo y preparación”, asumió Ceiber.

El no conseguir el paso a la siguiente ronda recordó lo ocurrido hace cinco años en los Juegos Olímpicos de Rio de Janeiro 2016. En esa oportunidad, Ceiber perdió el combate ante el ruso Misha Aloian en una decisión que generó confusión y reclamos por parte de su técnico, Rafael Iznaga, y el mismo pugilista.

Aunque el resultado de la pelea fue de 3 a 0, el desarrollo de la misma no reflejó esa superioridad del rival de Ávila. El entorno del boxeo habló de una decisión injusta y se recordó la expulsión en esas justas de seis jueces que fueron echados de los Juegos Olímpicos luego de varios resultados polémicos por parte de la Aiba, la organización que regula el boxeo amateur.

A Tokio 2020 y en la categoría peso mosca o los 57 kilogramos, Céiber quería desquitarse de lo sucedido en Brasil y revalidar por qué fue medallista de bronce en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015, plata en los Juegos Sudamericanos de 2018 y el oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2018, pero al no lograrlo no ocultó su decepción en declaraciones que conmovieron al país la noche de este sábado.