Horas tensas vive el fútbol colombiano desde la noche del pasado jueves, cuando casi a la par de que se iniciaba el juego entre Millonarios y Atlético Huila, en El Campín, la Superintendencia de Industria y Comercio revelaba el inicio de una investigación en contra de varios entes por algunas irregularidades.
Dimayor, Federación Colombiana de Fútbol y 29 equipos, se conoció un día después, tendrán que responder por algunas situaciones inusuales sobre cómo se han dado los pagos de salarios en la Liga Femenina desde su creación en 2017.
Con este tema como central, han salido otras situaciones y varias de estas se dieron tras el mencionado juego que se celebró en Bogotá. Un día después, el entrenador de los opitas, Diego Corredor, se pronunció por el arbitraje y también hizo una despiadada crítica a los jugadores nacionales.
“Aquí en Colombia, en el fútbol profesional, hay que decirle a un jugador que controle dirigido, que haga un pase fuerte; allá en Ecuador desde los 13 años se está trabajando esto”, fue su despiadado comentario para el nivel mostrado en Colombia, en comparación de otras ligas de Sudamérica.
Lo dicho en Win Sports durante este viernes, fue la continuidad de algo dicho de su equipo en la noche anterior donde perdió por 2-1 en la última jugada del compromiso: “No hay que desconocer lo que es Millonarios, pero hay goles de pelota quieta en los que son errores individuales”.
“Se compitió bien. Nos costó neutralizar el juego de Millonarios en el primer tiempo. Corregimos en el segundo y, creo que desde lo táctico, hicimos un buen trabajo, serio. Pero nuestro trabajo serio se vio perjudicado en la última jugada”, sentenció en rueda de prensa.
“Salimos tristes porque no hay un arbitraje serio. Si son siete, son siete, no diez ni nueve. No es hasta que hagan el gol. En Neiva con Águilas se perdió mucho tiempo y reponen cuatro”, criticó señalando al arbitraje que dejó prolongar el juego hasta que los azules marcaron el tanto de su triunfo.
“No sé cómo es la forma de la reposición o cómo ven ese tema los jueces. Estamos un poco aburridos por lo que está pasando. Nos toca competir, levantar la cabeza y jugar los partidos que vienen con la misma actitud”, aseguró bastante molesto.
“He estado un poco callado por el arbitraje, pero lo estamos sufriendo. Siguen más partidos, tenemos que revisar la cuestión táctica”.
“Se ve que el resultado no depende del trabajo de uno, sino de seres humanos que manejan el VAR, que toman decisiones en cancha, así que tenemos que neutralizar esto unidos, como equipo”, sentenció dando a entender que se sobrepondrán a los errores en las decisiones.
“Pienso que es algo normal, cuando uno viene a jugar a la altura sufre más que el rival. El rival busca ahogarnos con la intensidad y uno tiene que neutralizarlo desde la posesión y recuperándonos en algún tiro de esquina. Salimos a competir, desde la autocrítica creo que debíamos conservar más el balón”, cerró.
Ahora, con tres puntos menos en sus aspiraciones por clasificación, mira hacia adelante y mantiene su objetivo inicial claro: “Yo llegué con el mensaje de que vamos a meternos en los ocho y vamos a pelear un título”.
En su calendario por entrar a los ocho le restan grandes rivales: Medellín, América, Santa Fe y Junior, a los que busca competirles en cancha y no amedrentarse antes por una mentalidad derrotista: “A veces en el papel ya damos por perdido un partido, hay que salir a competir en cualquier estadio, hay que cambiar esa mentalidad”.