Hace algunas semanas, el fútbol colombiano se vio empañado por la agresión de un hincha del Deportes Tolima hacia el jugador Daniel Cataño, quien no soportó y respondió con golpes. El hecho se dio en la previa del duelo entre el equipo pijao y Millonarios por la Liga BetPlay. Cuando el jugador se encontraba calentando, un fanático invadió el terreno de juego y le dio un fuerte empujón al volante del cuadro ‘embajador’.
Enardecido por dicha acción, Cataño no tuvo más remedio que emprender una carrera hacia su agresor y responder con un golpe por la espalda que lo lanzó al suelo para que luego fuera capturado por las autoridades locales del estadio Manuel Murillo Toro.
Ahora, en Europa un hecho similar se registró este jueves en el duelo entre el Sevilla de España y el PSV de Países Bajos. En esta oportunidad, la víctima fue el golero Marko Dmitrović del cuadro español, quien sufrió un golpe por parte de un fanático del cuadro rival cuando se encontraba en desarrollo el duelo.
El portero se vio sorprendido, pero también reaccionó a la agresión de este seguidor del cuadro rival, tumbándolo al suelo y de paso entregarlo a los hombres de seguridad del estadio que se lo llevaron.
Luego de este suceso, Marko Dmitrović se vio sorprendido por el accionar de este hincha, pero a su vez aseguró que en estos casos, él sabe defenderse. “Me empujó por atrás. Seguramente enfadado por el resultado. Un poco alocado y borracho seguro que estaba’’, dijo de entrada.
“Intentó pegarme y conseguí agarrarle y tirarlo al suelo hasta que lo capturaran. Tenía mucha rabia en mi cuerpo, pero nunca es bonito reaccionar; no debía pasar en el fútbol, espero que tanto él, como las cosas en el fútbol deban ser castigados”, agregó luego del partido.
Lo que dejó el juego
El Sevilla se clasificó para octavos de final de la Europa League, este jueves, pese a sufrir y perder 2-0 en el campo del PSV Eindhoven en la vuelta de los play-off del segundo torneo continental.
El equipo andaluz hizo buena su victoria 3-0 de la ida para conseguir el pase a la siguiente fase de la Europa League, aunque los goles de Luuk de Jong (77) y Fabio Silva (90+5) dieron emoción a los últimos minutos del partido.
El equipo andaluz superó la presión en el Philips Stadion para seguir su camino en la que es su competición fetiche, que ha ganado en seis ocasiones, la primera de ella en este mismo escenario en 2006 frente al Middlesbrough inglés cuando todavía se denominaba Copa de la Uefa.
El PSV salió al césped de su estadio apretando y presionando arriba buscando provocar los errores del rival, pero poco a poco el Sevilla fue desactivando el brío de los locales.
El joven Xavi Simons fue el hombre más desequilibrante del PSV, pero el ataque neerlandés se encontró con la buena labor defensiva del Sevilla hasta el punto que en la primera parte no logró conectar ningún disparo entre los tres palos.
Poco a poco, el Sevilla se fue haciendo dueño del balón, como pedía la víspera el técnico Jorge Sampaoli, para marcar los tiempos de juego. El equipo andaluz pudo adelantarse en un saque de falta desde la frontal que Álex Telles envió ligeramente alto (15).