Luego de que se anunciara la creación de la Superliga Europea en la que participarían poderosos equipos del mundo del fútbol, las voces a favor y contra de este torneo no se hicieron esperar. Entre ellos, el papa Francisco, quien a través del periódico del Vaticano, el Osservatore Romano, abogó este martes por “detener” el “desconsiderado” proyecto de la Superliga.

Además, el sumo pontífice advirtió que el dinero “a menudo termina por arruinarlo todo”, también el mundo del fútbol.

“El dinero, el dinero en demasía, a menudo termina por arruinarlo todo, hasta las cosas más bellas. Porque el dinero da la posibilidad de comprarlo todo o casi todo, es el contrario de los sueños”, comienza el artículo, anunciado en la portada del diario del papa Francisco, un reconocido fanático de ese deporte y confeso hincha del San Lorenzo argentino.

Así mismo, el texto que fue firmado por Gaetano Vallini, se indicó que la Superliga pareciera ser excluyente, teniendo en cuenta que esta inicialmente fue ideada por doce grandes clubes de Europa.

“Mas que un círculo exclusivo -con los mejores juntado siempre con los mejores- lo que se acaba de presentar parece un grupo excluyente ya que el fútbol, como deporte, debería tener la inclusión como uno de sus valores cardinales”, se indica en el artículo titulado “En la Superliga de los ricos solo pierde el deporte”.

Y también se agregó: “El deseo es que se encuentre el modo de parar este desconsiderado intento que, además de barrer lo poco que todavía queda de creíble en el mundo del fútbol, amenaza con causar daños incalculables a todo el sector, visto el presumible descenso del interés hacia los campeonatos nacionales y copas europeas”.

Poco a poco la Superliga europea se ha desmoronado tras una oleada de renuncias de los seis clubes ingleses, mientras que el Atlético de Madrid anunció también su retirada y los tres equipos italianos (Juventus, Inter de Milán, AC Milan) admitieron este miércoles el fracaso del proyecto, lo que deja herido de muerte a este torneo apenas dos días después de su nacimiento.

Juventus y AC Milan no renunciaban formalmente en sus comunicados, pero utilizaron fórmulas en las que daban claramente un paso atrás. De los doce clubes fundadores del anuncio-bomba que convulsionó el lunes el fútbol europeo solo quedarían por lo tanto dentro los dos gigantes del fútbol español, Real Madrid y FC Barcelona.

El Atlético fue el primero de los españoles en dar marcha atrás y el Inter, el primero de los italianos.

“El Consejo de Administración del Atlético de Madrid, reunido este miércoles por la mañana, ha decidido comunicar formalmente a la Superliga y al resto de clubes fundadores su decisión de no formalizar finalmente su adhesión al proyecto”, anunció en su comunicado el club rojiblanco.

En términos similares se manifestó el Inter en otro comunicado. “El Inter de Milán confirma que el club ya no forma parte del proyecto de la Superliga”, dijo el líder de la Serie A italiana en su texto.

El Milan constató en su texto que las “voces (en contra) y las preocupaciones de los hinchas de todo el mundo sobre el proyecto de Superliga han sido fuertes y claras”, mientras que la Juventus estimó que había “pocas opciones” de que la competición pudiera realizarse “en la forma concebida originalmente”.

La ola de renuncias la había iniciado el martes el Manchester City, le siguieron luego Arsenal, Liverpool, Tottenham y Manchester United, antes de que el Chelsea completara el pleno, ya en la madrugada europea, y dejara a la Superliga sin las formaciones de la Premier League que había previsto y que constituían el 50% del proyecto.

Andrea Agnelli, presidente de la Juventus y uno de los artífices de la secesión, admitía ya en la mañana del miércoles que sin los clubes ingleses el proyecto de la Superliga Europea se había venido abajo, según una fuente de su entorno. Mientras, la Juventus se desplomaba en la Bolsa de Milán.