Xavi Hernández, entrenador del Barcelona, ha puesto sobre la mesa su solicitud a la dirección deportiva del club para acelerar el fichaje de un mediocentro que cubra la baja de Sergio Busquets. Aunque el cierre del mercado de verano está a dos meses de distancia, el técnico azulgrana no está dispuesto a esperar más y desea contar con el nuevo refuerzo a tiempo para el regreso del equipo, programado para el 10 de julio.
Consciente de las limitaciones económicas que descartan opciones como Martín Zubimendi y Joshua Kimmich, Xavi ha fijado su mirada en Oriol Romeu como el candidato ideal para cubrir la posición de pivote durante este período de transición, hasta que el club tenga los recursos financieros para abordar un refuerzo a largo plazo.
El entrenador del conjunto catalán está convencido de que el jugador del Girona, formado en La Masía, posee los conceptos arraigados del espíritu de juego azulgrana. Se rumorea que Xavi ha mantenido conversaciones con Romeu, lo cual no ha sido bien recibido en el seno del Girona. Fuentes del Camp Nou indican que estos contactos podrían haber sido positivos y que se espera que las negociaciones finales con el Girona se lleven a cabo en los próximos días.
Romeu fue una pieza clave en el esquema del técnico Miguel Ángel ‘Míchel’ Sánchez en la pasada temporada, disputando 33 partidos y anotando dos goles. Sin embargo, su afición por el Barça, el equipo que lo vio crecer, dificulta el rechazo hacia el club.
Después de destacar en la cantera del Espanyol, el Barcelona lo fichó para el Infantil A. “Entré siendo un niño y salí siendo un hombre”, expresó Romeu meses atrás cuando se le preguntó sobre su relación con el equipo culé.
Durante su etapa en el club desde 2004 hasta 2011, logró un ascenso a Segunda División con el filial bajo la dirección de Luis Enrique, a quien idolatra. En 2011, fue traspasado al Chelsea, pero un año antes, Pep Guardiola le dio su debut en el primer equipo del Barça en el último partido de Liga contra el Deportivo de la Coruña. Curiosamente, en ese partido también estaba presente Xavi, quien ahora lo reclama.
A pesar de ese debut en Primera División con la camiseta azulgrana, Romeu nunca logró establecerse completamente en el primer equipo. Ahora, después de adquirir experiencia y éxitos en clubes como Chelsea, Valencia, Stuttgart y Southampton, podría finalmente tener la oportunidad de regresar y trascender.
El Barça está en busca de un nuevo Sergio Busquets, y Oriol Romeu presenta algunas similitudes con él. Míchel no pierde oportunidad para elogiarlo por su gran desempeño, la última vez en la revista Panenka, cuando se le preguntó sobre la importancia de Oriol Romeu en el Girona: “Es el jugador, quizás junto a Mikel Rico, que más ha comprendido lo que quiero. Llega a todos los lugares, equilibra todo y a su alrededor debo construir la estructura”. Perder a Oriol Romeu sería un golpe moral para el conjunto rojiblanco, pero un impulso económico importante.
Días atrás, el Barcelona anunció el fichaje del centrocampista alemán Ilkay Gündogan, pieza clave del Manchester City de Guardiola, para añadir opciones a un centro del campo en el que aún debe encontrar recambio para el gran hueco que dejó Busquets.
Pese a que el Manchester City había intentado retener al centrocampista, de 32 años y que finalizaba contrato en junio de 2023, con una propuesta de extensión de un año y otro extra como opción, la presión del club catalán acabó ganando la partida.