En los últimos días se habló sobre la llegada de Andrés Felipe Román a Boca Juniors después de que el conjunto argentino llegara a un acuerdo con Millonarios para quedarse con la mayor parte de los derechos, situación que dio un giro inesperado tras los exámenes médicos.

Este jueves en la mañana, el lateral derecho de 25 años arribó a Buenos Aires para realizarse los exámenes de vinculación al xeneize, por pedido explícito del técnico Miguel Ángel Russo, quien lo hizo debutar en 2017.

Aunque todo estaba calculado en dos millones de dólares por el 80 % de los derechos, primero se conoció desde Argentina que la negociación estaba caída porque Andrés Felipe Román no había superado con éxito la revisión que le realizó el cuerpo médico de Boca Juniors.

Posterior a eso, se filtró que todo se trataría de una miocardiopatía hipertrófica, lo cual es una afección derivada de un engrosamiento anormal del músculo del corazón. Se trata de una situación clínica que el cuerpo médico de Millonarios nunca informó, pese a que al inicio de temporada se llevaron a cabo los procedimientos médicos para el reintegro al club.

Para ponerle fin a las especulaciones, de inmediato Boca Juniors dio conocer el comunicado oficial sobre lo sucedido este jueves con Román. Para la mala fortuna del deportista, el equipo decidió prescindir de sus servicios.

“Boca Juniors y Millonarios Fútbol Club de Colombia informan que el jugador Andrés Felipe Román no superó los estándares médicos requeridos por el Departamento Médico de Boca, requisito indispensable para la realización de la transferencia”, reza el comunicado del conjunto argentino.

Ante esta situación, el jugador tendrá que regresar a Millonarios. Eso sí, primero se espera que sea evaluado por el cuerpo médico para hacerle el seguimiento a la situación cardiaca.

Los sucedido con Román hace recordar las palabras de hace unas semanas de César Carrillo sobre el funcionamiento del cuerpo médico de Millonarios. El mediocampista mostró su desacuerdo con el proceder de los médicos por una lesión que lo sacó de las canchas.

“Las terapias no fueron adecuadas, cuando empecé a entrenar nunca me sentí totalmente recuperado, perdí mucho tiempo en ese proceso de recuperación y por eso decidí salir antes de que se acabara el contrato con Millonarios, para ganar tiempo para poderme recuperar bien en Medellín”, contó Carrillo en entrevista con Casa Azul Radio.

El volante no tuvo miedo de poner sobre la mesa los nombres de quienes él considera están haciendo mal las cosas en el cuadro ‘azul’: “Los médicos, Juan Piñeros y Catalina Chica, son los encargados de las recuperaciones. Los fisioterapeutas solo siguen órdenes. Y creo que todo está mal desde quienes encabezan el proceso. Es algo deficiente en Millonarios, por no decir pésimo”.