El candidato ultraderechista, Javier Milei, a sus 53 años, se convirtió en el nuevo presidente de Argentina y sucederá a Alberto Fernández en el cargo. En segunda vuelta se impuso sobre el oficialista Sergio Massa.
Sobre las 9:30 p. m. de este domingo 19 de noviembre en Colombia, las autoridades electorales de Argentina dieron los resultados oficiales con Milei, del Movimiento La Libertad Avanza, con el 55,69 % de los votos, y Sergio Massa, de Coalición Unión por la Patria, con el 44,30 %.
Como buen argentino, el nacido en Buenos Aires, tiene pasión futbolera. Su pasado dice que fue arquero en las Inferiores de Chacarita Juniors; es hincha y socio de Boca Juniors y seguidor de Carlos Salvador Bilardo.
Fue durante su adolescencia, entre los años de 1987 a 1989, que se puso los guantes en el arco del Funebrero.
Incluso, en Chacarita Juniors, alcanzó a formar parte del plantel profesional. Sin embargo, dejó el balompié para estudiar economía. Su paso por el fútbol se dio desde los 12 años.
“Pocos saben que el recién electo presidente de Argentina, Javier Milei, fue un prometedor arquero de las canteras de Chacarita. Llegó a formar parte del primer equipo sin debutar en partidos oficiales. Figura como juvenil hasta que se decidió por los estudios de economía”, indicó Jaime Ricardo Gómez, narrador y comentarista de fútbol.
Muchos de sus colegas dentro de la cancha hablan de una transformación del camerino al terreno de juego. Pasaba de ser tranquilo e introvertido, a “un loco del arco”, como lo dijo su excompañero Eduardo Perico Pérez. “Se la jugaba en todas, era un loquito mal adentro del arco. Cuando atajaba, se convertía. Era ponerse la camiseta y hacer locuras adentro del arco, se tiraba de cabeza, cosas que decías ‘este tipo está completamente loco”, puntualizó.
Milei es socio activo de Boca, festejó mucho el título del 92 con Oscar Tabárez de entrenador y siguió gran parte de la campaña del equipo de Carlos Bianchi y allí admiró mucho a Martín Palermo. Sobre Riquelme fue más duro, recordó que no le gustó cuando lo reincorporaron la última vez porque le pareció algo populista, se tiraba de cabeza, cosas que decías ‘este tipo está completamente loco”, puntualizó.
“Era muy altanero, fuerte, no cambió en eso, sigue siendo el mismo. Exactamente, igual como es en la vida era de arquero. Se tiraba para todos lados, no le importaba nada, era de esos tipos fuertes, grandote, medio loco, porque le decíamos ‘el Loco’. Buen arquero”, dijo Gabriel Bonomi, exjugador de Chacarita que se desempeñó como defensa central. Recuerda además que era de esos guardametas que gritaba constantemente a los integrantes de la zaga.
Eduardo Grecco, uno de los entrenadores del actual presidente, también opinó en Olé sobre su papel de arquero.
“Tengo los mejores recuerdos suyos, nadie puede decir nada malo de Javier Milei porque fue intachable. Tiene el pelo todo revuelto como ahora, Yo lo habré dirigido seis meses. Esa categoría era una de las mejores que se recuerda en la historia de las Inferiores de Chacarita, la 70″.
Milei se probó también en el equipo de San Lorenzo.
“Javier Milei llegó a San Lorenzo tras haberse probado en Chacarita. Entrenaba tres horas por día y el trabajo específico de arquero lo hacía con una valla de un metro y medio en el medio del arco para volar de palo a palo”, contó en redes sociales el periodista deportivo y seguidor de San Lorenzo, Facu de Lillo.
Actualmente, es socio activo de Boca, donde están los colombianos Frank Fabra y Jorman Campuzano. Admirador de Martín Palermo, de Carlos Salvador Bilardo, entrenador del equipo xeneize en 1996, del fútbol italiano y Fabio Capello Se denomina Bilardista. Con Juan Román Riquelme ha sido más crítico.
Desde ya, hay expectativa de lo que será su relación con el presidente de la AFA - Asociación del Fútbol Argentino - Claudio Tapia, y el tesorero de la entidad, Pablo Toviggino, quienes apoyaron públicamente la candidatura de Sergio Massa.