Este jueves 15 de junio se jugó el partido amistoso entre la Selección de Argentina, campeona del mundo en Catar 2022, y su similar de Australia. El partido disputado en Pekín, tuvo una gran exhibición por parte de los campeones del mundo y en especial de su gran estrella Lionel Messi, quien maravilló a los asistentes al partido que terminó ganando la albiceleste con un marcador de 2 a 0.
Y así como sucedió hace unos meses en el partido amistoso ante Panamá y Curazao, la camiseta de Argentina tuvo un nuevo detalle que sorprendió a propios y extraños. En ese momento fue el estreno de la tercera estrella en el escudo, que hace alusión a los mundiales ganados por los argentinos. Este jueves, la gran sorpresa fue ver los nombres de los jugadores de la albiceleste en chino.
El motivo del cambio en la camiseta fue el lugar donde se disputó el partido. Debido al fanatismo que ha generado Messi y Argentina en China luego de ganar la Copa del Mundo, se decidió corresponder a ese afecto cambiando los apellidos de los futbolistas del español al chino, para que así, los 70.000 hinchas en el estadio y las demás personas de ese país que veían el partido por televisión, pudieran leer el nombre de cada jugador en la camiseta del país sudamericano.
Y es que tan especial fue la visita de los campeones al mundo al país asiático, que Lionel Messi, considerado por muchos el mejor futbolista del planeta, se atrevió a decir unas palabras en chino para todo el estadio: “Siempre que venimos a China la gente nos trató muy bien. Estos días que estuvimos acá con la selección, hay gente que está esperando cuando salimos al entrenamiento, en el estadio. Es impresionante como siguen, así que muy agradecido”, dijo el capitán de Argentina.
La camiseta generó locura en China y también en otros países del mundo, ya que es una prenda deportiva inédita en la historia de la Selección Argentina, por lo que muchos coleccionistas argentinos y de todo el planeta soñaran tener esta nueva versión de la camiseta albiceleste.
Locura por Messi en China
La “messimanía” se apoderó de Pekín antes de un partido amistoso la tarde del jueves entre los campeones mundiales de Argentina y Australia en la capital china. Todos los ojos están sobre Lionel Messi, considerado por muchos como el mejor futbolista de todos los tiempos y quien llevó a Argentina a la gloria mundialista en diciembre en Catar.
Cientos de aficionados chinos con banderas argentinas y camisetas del rosarino se han congregado en el exterior del lujoso hotel de la selección desde que su ídolo llegó al país el sábado. La multitud se apostó en las calles aledañas, fuertemente vigiladas, con la esperanza de poder atisbar al futbolista de 35 años cada vez que el equipo se dirigía al entrenamiento. Aunque el astro guardó un perfil discreto, eso no restó entusiasmo a sus seguidores.
Un aficionado contó a la AFP su aventura nocturna dentro del hotel Four Seasons en un intento de encontrarse de cerca con Messi y sus compañeros. “Primero me escondí en el cuarto del conserje, luego subí a la planta del equipo a través de la escalera de incendios”, dijo este hombre apellidado Lin a la AFP. La seguridad del hotel lo atrapó y lo interrogó antes de dejarlo marchar.
Otro fanático, Li Weihua, explicó que había tomado un avión desde su ciudad de Shenzhen, en el sur de China, solo para intentar ver a Messi en los alrededores del hotel. Ni siquiera dispone de entrada para el partido en el estadio de los Trabajadores, cuyos 68.000 asientos se agotaron rápidamente. “Solo quiero sentir el ambiente”, dice el hombre de 29 años, que nunca antes había viajado a Pekín.
Huang Yongming, de 17 años, tuvo más suerte en conseguir una de las tan codiciadas entradas. “Me gasté alrededor de 3.000 yuanes (419 dólares) por la entrada”, dice este joven procedente de la ciudad de Changchun, en el noreste. “Sé que es caro, pero pensé que si no aprovechaba la oportunidad, lo lamentaría”, explica.
En medio del partido, uno de los fanáticos chinos saltó a la cancha y pudo saludar al futbolista argentino. Inmediatamente fue sacado por la seguridad del estadio. Sin embargo, el hincha salió completamente sonriente de haber cumplido el sueño de estar cerca de su ídolo.