El planeta fútbol, sin fronteras, le rinde honores el jueves al argentino Diego Maradona, idolatrado artista de la pelota de todos los tiempos, al cumplirse un año de su fallecimiento, a los 60 años en su lecho de enfermo.
Hinchas, futbolistas, entrenadores, clubes y celebridades de todo el mundo evocan al genio. Jugador endiosado por su talento y personalidad, sigue vivo en la memoria colectiva. Se rinde tributo a sus hazañas deportivas, pero varias de sus historias personales están en entredicho.
En las canchas argentinas, los jugadores forman filas para dibujar un 10, su icónica camiseta. Los aficionados entonaron a voz en cuello el legendario grito de amor: “¡Maradó, Maradó!”.
Otro recuerdo, íntimo y acorde con el duelo, viven con retiro sus hijas e hijos Dalma, Gianinna, Diego Junior, Jana y Diego Fernando, sus hermanas y hermanos.
El 25 de noviembre de 2020 la peor de las pesadillas sucedió: su enorme corazón y sus pulmones se apagaron. Fue la crónica de una muerte anunciada en la que nadie quería creer.
No descansa en paz. Murió en soledad y agonía, “abandonado a su suerte”, según los peritajes. Hay siete profesionales de la medicina acusados de homicidio por mala praxis. Su herencia es motivo de otro entuerto judicial.
Fue la hora de entrar al olimpo de los mitos de la argentinidad con muerte trágica: Evita Perón, el Che Guevara y Carlos Gardel (donde fuere que haya nacido). Hace un año, multitudes rompieron las reglas antipandemia y ganaron las calles en el funeral.
“Yo me robaría el cajón de Maradona/para pasearlo por todos los barrios/de pibes pobres”, escribió la poeta argentina Liliana Campazzo.
Messi bendito
En primera fila de homenajes estará Lionel Messi, sucesor en la capitanía de la albiceleste. Maradona lo bendijo como heredero en 2006: “Conozco al jugador que ocupará mi lugar, su nombre es Lionel Messi”.
La pulga lo reverenció. Al marcar goles, mandaba besos al cielo con ambas manos. Tras ganar la Copa América 2021 ante Brasil en el Maracaná, volvió a mirar el cielo y dijo: “Seguro nos bancó (apoyó) desde donde esté”.
Ahora hacen furor en las pantallas los videos de Maradona. Una y mil veces pasan el mejor gol de la historia de los Mundiales, en México 1986, a Inglaterra (2-1), tras una poética travesía de gambetas.
Y aquel primer gol con trampa que ironizó como “la mano de Dios”. Pasan goles de todos los colores en la Selección, en el Juvenil campeón de Tokio 1979, en Boca Juniors, Barcelona, SCC Napoli, Sevilla y Newell’s.
Dice una canción que popularizó su amigo Rodrigo: “En un potrero forjó una zurda inmortal”. Es el himno a su origen en una villa miseria del suburbio sur.
“Te vamos a extrañar”, reza una leyenda de la Liga Profesional argentina, en un video que estrena otro tema musical en su memoria.
Canta Rodrigo: “Por no venderse jamás, al poder enfrentó”. La faz política de Maradona fue explosiva. Lideró una marcha multitudinaria contra el expresidente de EE. UU. George W. Bush. Tildó de “mafiosos” a varios presidentes de FIFA.
Maradona fue como un rockstar, una estrella de Hollywood entre la adoración y el abismo de la muerte, la droga y el alcohol.
En otros mundiales lo acribillaron a patadas (España 1982 e Italia 1990) y lo suspendieron por doping (EE. UU. -1994).
Tiburón en piscina
Todo fue de película. Desde hacer un jueguito de cabeza con el brasileño Pelé, amigados en la TV. O entrevistar al excampeón mundial de boxeo Mike Tyson o al exlíder cubano Fidel Castro.
En su apogeo, rebelde y desafiante, fue en Nápoles pasión y locura. El SCC Napoli ganó por primera y única vez dos Scudettos y un título internacional, la Copa UEFA.
Ahora le erigen dos estatuas en el renombrado estadio Diego Maradona. A una de bronce la llamarán “la del pueblo”. “Me lo imaginaba volando hacia el infinito”, dijo el escultor, Domenico Sepe.
Emociones fuertes se viven en su último club como DT, Gimnasia La Plata. Su llegada fue “una revolución terrible”, dicen los gimnasitas.
Nadie lo definió mejor que su entrenador personal Fernando Signorini: “Diego era un tipo con el que yo hubiera podido compartir toda la vida, pero con Maradona ni un minuto, era insoportable por todo lo que de él se generaba, era como estar en una piscina con un tiburón”.
Mujeriego incorregible y peleador, todavía le buscan más hijos/hijas o amantes. Apareció ahora el testimonio de abuso de la cubana Mavys Álvarez, cuando tenía solo 15 años.
“Es duro estar en su país (de Maradona), ver que está en todos lados, que es un ídolo, y que a la misma vez se siente feo lo que recuerdo de él como persona”, declaró Mavys en una rueda de prensa en Buenos Aires, tres días antes de cumplirse el primer aniversario de la muerte del 10.
*Con información de la AFP.