SEMANA: ¿Cómo está después de las últimas lesiones?

Mariana Pajón: Estoy bien, recuperándome nuevamente en Colombia, haciendo todo lo posible para estar muy pronto sobre la bici y poder llegar a los próximos retos, entonces estamos dando lo mejor.

SEMANA: ¿Qué fue lo que pasó?

M.P.: Estaba en unas rondas de Copa Mundo en Holanda, y en los entrenamientos se me deslizó la rueda delantera en uno de los peraltes y me golpeé bastante fuerte. Tuve una contusión cerebral y un poco de golpes. Eso me está afectando para volver a montar, pues me dañé los ligamentos de los dedos y eso me impide tener agarre. Estoy con la mejor terapia para volver pronto y poder correr esos Juegos Bolivarianos.

SEMANA: ¿Qué tan grave fue el golpe en la cabeza?

M.P.: Creo que algo muy bueno es que me acuerdo de todo, he tenido muchos golpes, pero la cabeza es lo que más hay que cuidar. Estuve un rato inconsciente, se me fue el aire, eso me descompensó y me tuvieron que llevar al hospital. Tenía también un fuerte golpe en las costillas, revisaron que no tuviera nada en los órganos y nada más grande. Gracias a Dios estoy bien.

SEMANA: Antes de los olímpicos se lesionó la rodilla, estaba volviendo a su punto y pasa esto, ¿cómo volver a empezar?

M.P.: Es gracioso porque muchas personas me escribieron que yo me caigo mucho, hice la cuenta y desde 2019 no pasaba. Me caigo poco, pero cuando pasa me pego muy duro. Una vez estaba en el gimnasio y me desgarré los discos de la espalda. Estaba volviendo y otra vez. Hay que tener paciencia, a veces pensamos que todo está en nuestra contra, pero esos momentos hay que pasarlos rápido, así como pasan los triunfos.

Ha sido campeona en los Olímpicos de Londres y Río de Janeiro. En Tokio ganó medalla de plata. | Foto: GUILLERMO TORRES

SEMANA: Su esposo fue una gran ayuda, incluso tuvo que peinarla...

M.P.: Estábamos entrenando juntos y cuando me caí casi le da un infarto. Estuvo conmigo en el lugar hasta que me llevó la ambulancia. Pese a que tenía la Copa Mundo, estuvo en el hospital durante los exámenes, la observación y obviamente hasta peinándome, somos un equipo.

SEMANA: ¿Hasta cuándo hay plazo para decidir si va a los Juegos Bolivarianos?

M.P: Todos están muy atentos de mi recuperación; los médicos del Comité, el fisioterapeuta y el entrenador han estado día a día acompañándome. Yo sigo entrenando con una mano, pero sigo entrenando. Obviamente, no puedo montar en la pista, pero puedo estar en el gimnasio. Nuestra carrera es el 1 de julio, tendré hasta este día para probar. Me estoy apoyando en un brazo especial para poder coger el manubrio. Mi ortopedista me tiene mucha fe y yo sé que si él me dice que voy a poder, pues lo haré. Me dolerá, pero para mí es un orgullo representar al país y quiero hacerlo así me duela.

SEMANA: ¿Cómo hace para tener tanto positivismo?

M.P.: En las redes sociales todo puede sonar positivo, pero la verdad es que yo también lloro, me preocupo, me frustro y me toca ver pasar carreras desde la tribuna. Correr una Copa Francia con dolor y después lesionarse nuevamente así que a veces no es fácil. Todos tenemos retos diferentes y depende de cada uno cómo se asuma la situación, tener la mejor actitud para ir superando los problemas, pero sobre todo rodearte de gente que te ayude. Tengo a mi esposo que me levanta, mis papás que me dicen que sí puedo, un montón de personas que esperan que yo corra esos Juegos Bolivarianos y eso también me va impulsando.

SEMANA: ¿Estará nuevamente en unos Juegos Olímpicos?

M.P.: Este año la vida me ha mostrado que también necesito un descanso, que necesito recuperarme. A veces tenemos que parar, la vida nos muestra cómo cosas pequeñas van avanzando, van poniéndose más grandes, así que yo también tengo que escuchar eso, escuchar mi cuerpo. Estoy en un alto y por ahora no lo tengo definido.

SEMANA: ¿La presiona que todos la quieran ver de nuevo en los olímpicos?

M.P.: Creo que eso es lindo, porque creen en uno y te motivan. Yo ya he cumplido mis sueños, estoy superándolos y quiero hacer un poquito más como persona y deportista. Puede ser en bici o no. Los juegos en París no están como mi objetivo número uno, me quiero recuperar. Todavía soy muy joven y no quiero seguir con dolores por todos lados.

SEMANA: ¿Pero si no es usted en el BMX de los olímpicos entonces quién?

M.P.: Hay un equipo muy fuerte, tenemos grandes aspirantes. Gabriela Bolle, Andrea Escobar y Camila Restrepo pueden clasificar a unos Juegos Olímpicos y les puede ir muy bien. El bicicross no es igual a Mariana Pajón, hemos abierto las puertas para muchos deportistas.

SEMANA: ¿Será entonces el retiro de Mariana Pajón?

M.P.: No, el retiro todavía no está en mis planes. El bicicross siempre va a ser mi vida y si puedo representar a mi país o ser feliz sobre dos ruedas, lo haré. Hay otros retos deportivos en otras modalidades que también estoy analizando, pero también en mi vida personal. Mi prioridad es mi familia, mi integridad y ya.

SEMANA: ¿El ciclismo de pista es otro de esos retos?

M.P.: Puede ser uno de esos retos. No es un secreto que ahora la modalidad de velocidad por equipos necesita tres mujeres. Si puedo estar en lo que sea, estaré dando lo mejor de mí.

SEMANA: ¿Ser mamá es su prioridad?

M.P.: Ser mamá es una prioridad que también tengo porque no es solo mi sueño el de ser mamá. No he tomado la decisión aún. Pienso en mi esposo, mis papás por verlos disfrutar y que tengan la energía para compartir con sus nietos.

SEMANA: Las amenazas que recibieron su esposo y usted, ¿en qué van?

M.P.: El tiempo lo va curando todo y lo va poniendo todo un poquito más tranquilo. Ver todo eso que se vive en redes sociales desmotiva porque hay mucho rencor, intolerancia, desinformación y tratan mal a personas que ni conocen. Ese fue el reto más grande en mi carrera deportiva, ver todo eso. No es fácil curarse, hay que pasar la página.

SEMANA: El país está muy dividido y lleno de miedo tras las elecciones, ¿qué decir?

M.P.: A mí me insultan y yo ni siquiera hablo. Me tildan de petrista y uribista. Quiero que los colombianos tengamos mucha tolerancia, pero sobre todo mucha unión y esperanza. En este momento es cuando más necesitamos estar unidos. Es dejar gobernar y dejar hacerlo de la mejor forma para que nosotros estemos bien. No irrespetemos al otro por pensar diferente.

SEMANA: ¿Le gustaría trabajar en el Ministerio del Deporte?

M.P.: No, yo creo que hay personas que están preparadas para llegar a un cargo así de grande e importante. Es un puesto político y no es mi manera de actuar, no estoy acostumbrada a hacerlo. Sigo con mi fundación y con lo que hago como deportista puedo aportar mucho más.

SEMANA: ¿Cómo le gustaría que la recuerden?

M.P.: Como una persona guerrera, luchadora, que quiso un país. Como una niña que tuvo un sueño y que luchó por eso, que las oportunidades no le llegaron y que fui por ellas. Di el 100 por ciento para dejar en alto a Colombia y que nos miren diferente a como siempre nos han visto.