Real Madrid y Barcelona no fueron ajenos a una nueva polémica que arma debate a nivel mundial. Sobre los 27 minutos de partido, cuando el marcador estaba empatado 1-1, Lamine Yamal estuvo a escasos centímetros de marcar un gol histórico a sus 16 años de edad.
El joven canterano de La Masía tiró un taco en el primer malo y dirigió el balón hacia la portería del ucraniano Andriy Lunin, que como pudo la rechazó utilizando las palmas de sus dos manos.
El árbitro señaló tiro de esquina para Barcelona, pero esperó un tiempo prudente para la revisión desde el VAR. Tras varios minutos con el juego detenido, desde la cabina declinaron el reclamo de gol por parte de los catalanes, manteniendo la igualdad en el marcador.
Lo cierto es que ninguna de las repeticiones fue clara y eso hizo que el debate entre hinchas de ambos equipos se convirtiera en una discusión de nunca acabar en redes sociales.
A raíz de esa decisión, el primer tiempo terminó con empate a un gol. El danés Andreas Christensen abrió la cuenta para el Barcelona a los 6′ minutos, pero, en otra decisión controversial, Real Madrid equilibró la balanza con un supuesto penal sobre Lucas Vásquez.
El encargado de convertir la igualdad parcial fue Vinicius Jr, que nuevamente se hace presente en las redes del clásico español y pone a celebrar a sus hinchas en el estadio Santiago Bernabéu.
A pesar del buen espectáculo de fútbol que dieron catalantes y madridistas, la opinión pública se quedó con el gol de Lamine Yamal que no subió al marcador.
Misterchip, periodista experto en datos y estadísticas, levantó la voz en contra de no tener herramienta tecnológica para resolver este tipo de dudas. “Se llama goal-line technology y no existe en La Liga para vergüenza y bochorno de quienes gobiernan el campeonato español”, escribió en su cuenta de X (antigua Twitter).
Justo en un clásico definitivo para La Liga
Lo peor que le podía pasar a los directivos de la liga española era que sucediera una jugada tan cerrada en un partido decisivo para decantar por completo el título del Real Madrid o darle una pequeña luz de esperanza al Barcelona en la recta final de la temporada.
El Barça llegó al Bernabéu con ocho puntos de desventaja, por lo que sabía que todo lo que no fuera ganar le podría difícil defender su trono, la única ‘bala’ que le queda en esta campaña, ante un Real Madrid que sí salió airoso en la Champions en un auténtico ejercicio de supervivencia ante el asedio al que le sometió el Manchester City, que hincó la rodilla tras más de dos horas de encuentro y una tanda de penaltis.
El equipo madridista tiene el ánimo por las nubes y vuelve a soñar cerca la posibilidad de un doblete que ya fue capaz de hacer en la 2021-2022 y que no ha sido muy habitual en su historia. Otra cosa es el aspecto físico que Carlo Ancelotti no tuvo muy en cuenta para este clásico, pues alineó lo mejor que tiene en su arsenal.
Y es que Real Madrid sabía que esta era la oportunidad perfecta para bajarle el martillo al campeonato, teniendo en cuenta que había salido victorioso de las últimas tres salidas ante su máximo rival en España: la victoria (0-4) que dio el pase a la final de la Copa del Rey del año pasado, el de la primera vuelta por liga en el Lluís Companys de Montjüic (1-2) y en la final de la Supercopa de España (4-1).
*Con información de Europa Press.