El jugador de los Buffalo Bills Damar Hamlin se derrumbó este lunes en el campo y recibió asistencia médica de urgencia antes de que una ambulancia se lo llevara al hospital durante el partido en la NFL contra los Cincinatti Bengals.

Hamlin recibió un golpe, se puso de pie, y luego se derrumbó en el suelo y recibió atención médica durante más de 20 minutos.

Los jugadores se reunieron alrededor de Hamlin y muchos de ellos se arrodillaron para orar durante el tratamiento.

El juego se suspendió temporalmente luego de discusiones con los entrenadores de los dos equipos.

La multitud en Cincinnati permaneció en silencio y la cobertura televisiva se separó de la escena en el campo.

Según ESPN Hamlin, de 24 años, recibió oxígeno cuando se fue después de ser colocado en una camilla y su familia, que estaba viendo el partido, se unió a él en la ambulancia.

Los informes dijeron que Hamlin había sido llevado al UC Medical Center.

Inicialmente, los informes sugirieron que el juego se reiniciaría después de un calentamiento de cinco minutos, pero luego de discutir con los entrenadores del equipo, los jugadores se dirigieron al vestuario y el juego fue declarado “suspendido temporalmente”.

Booger McFarland, analista de ESPN, dijo que la NFL debería cancelar el juego.

“Nadie está preocupado por el fútbol en este momento... están preocupados por una cosa, la salud y la seguridad de este joven”, añadió.

Las imágenes de video mostraron que Hamlin había sido golpeado en la parte superior del pecho.

La NFL, uno de los deportes de equipo más violentos, ha estado lidiando con crecientes preocupaciones en los últimos años sobre las lesiones por conmoción cerebral de los jugadores por golpes en la cabeza.

En continuidad de lo sucedido en campo, se supo también que al jugador se le aplicó reanimación cardiopulmonar y efectivamente, fue trasladado a un hospital cercano con prontitud ya que no presentaba mejoría con las primeras intervenciones que se le dieron de primera mano.

Tras momentos de incertidumbre, se supo que Hamlin pudo llegar a un hospital de Cincinnati después de haber recibido la asistencia médica administrada con RCP. Para ese momento, la NFL esperaba más noticias sobre la condición de salud de deportista en busca de decidir si se llevaba a cabo la reanudación del compromiso o no.

Finalmente, la decisión fue dar por pospuesto el duelo de manera oficial y por consiguiente, no dar su reanudación durante la noche de este 2 de enero. A la par de esto, se conoció que Damar entró en un estado crítico del cual saldría si había un movimiento rápido y eficaz de la situación por parte del cuerpo médico tratante.

Por fortuna, antes de cerrar la noche de los Estados Unidos hubo otras actualizaciones sobre el jugador que sufrió el impase, pues se supo que hubo una mejoría significativa en los signos vitales y que los profesionales de la salud habían puesto a dormir al deportista para colocarle luego un tubo de respiración en la garganta, con la intención de ayudarlo en el tratamiento, además, de seguirle realizando pruebas.