En plena polémica por los escándalos de apuestas que se han destapado en el mundo, los ojos de los fanáticos se encuentran bien abiertos en busca de pistas o detalles que puedan sugerir la culpabilidad de jugadores, técnicos o cualquier persona que tenga que ver con el fútbol.

Partidos como el Manchester City vs. Chelsea son bien apetecidos por los apostadores y, aunque no hay indicios de alguna práctica fraudulenta en torno al juego, hay quienes han señalado el comportamiento presuntamente sospechoso de Mateo Kovacic al momento en el que los blues marcaron el empate 4-4 a través del penal convertido por Cole Palmer.

En un video grabado desde la parte baja de la tribuna, se ve el momento en el que Palmer marca el cuarto tanto del Chelsea y Kovacic, vestido con la camiseta número 8 del City, se da vuelta aparentemente cerrando el puño en señal de celebración.

Fragmentos desde distintos ángulos se han hecho virales en Europa, donde la Uefa y los directivos de las grandes ligas tienen todas las alarmas encendidas para erradicar este nuevo mal que empaña el deporte a nivel internacional.

Cabe recordar que el mediocampista croata tuvo un paso reciente por el Chelsea e incluso fue campeón de Champions League en la temporada 2020/21, pero aceptó la oferta de Pep Guardiola para llegar como reemplazo del alemán Ilkay Gündoğan, que ahora defiende los colores del Barcelona de España.

A lo largo de la temporada, Kovacic ha sido pieza importante en el andamiaje del conjunto ciudadano, que, a pesar de perder los tres puntos en la última jugada del partido, continúa líder de la Premier League con 28 puntos, uno más que Liverpool y Arsenal, sus más inmediatos perseguidores.

Tras la disputa del próximo parón de selecciones, el Manchester City enfrentará a los dirigidos por Jürgen Klopp en un duelo que se califica como final anticipada para la carrera por el campeonato de esta temporada.

Mateo Kovacic y Thiago Silva, abrazados tras el empate entre Manchester City y Chelsea. | Foto: Copyright 2023 The Associated Press. All rights reserved

Un partido de locura

La reacción de Mateo Kovacic cobra más importancia al considerar que Manchester City luchó a muerte para conseguir la victoria y la tuvo en sus manos gracias al gol de Rodri faltando pocos minutos para el pitazo final, sin embargo, una desafortunada acción de Rubén Díaz, derribando en el área al delantero Armando Broja, provocó la sentencia del 4-4 final.

Si el City hubiera ganado este partido de locura en Stamford Bridge, habría sacado una diferencia de tres puntos sobre sus rivales directos, lo que le hubiera dado la posibilidad de permanecer en la punta aun cayendo ante Liverpool en la jornada que reabrirá el campeonato tras el parón internacional.

“Podría haber sido mejor, pero también podría haber sido peor, así que es bueno para la Premier League”, expresó Guardiola.

Y es que el campeonato inglés está acostumbrado a dar este tipo de espectáculos, pero la realidad de esta temporada ha sido más escándalos y decisiones polémicas de los árbitros que un brillo puro de los futbolistas dentro del campo de juego.

El estratega español aseguró que el empate es “justo” por lo demostrado en los tramos que dominó cada uno de los equipos. “Fue un partido disputado. Tuvimos momentos con un 2-3 en nuestras transiciones, no para definir el partido, porque cuando faltan 40 minutos muchas cosas pueden suceder”, explicó.

“Iban a pasar muchas cosas, pero, claro, en el tiempo añadido íbamos por delante, y pudimos defender mejor. El penalti es penalti. Creamos muchas ocasiones, probablemente las más que he tenido en mis visitas a Stamford Bridge, pero ellos también crearon mucho”, dijo Pep, felicitando también a los dirigidos por Mauricio Pochettino al atreverse a jugar sin miedo a la derrota.