Un nuevo escándalo en el fútbol venezolano le está dando la vuelta al mundo.
El clásico entre Caracas FC y Deportivo Táchira terminó en polémica tras un gol anulado por fuera de lugar al conjunto capitalino. Al minuto 99, cuando el marcador estaba 1-1, Everardo Rose anotó el tanto que les daba la victoria a los rojos; sin embargo, tras una revisión del VAR, el árbitro central señaló posición adelantada en el cabezazo previo.
Rose se quitó la camiseta y vio la tarjeta amarilla tras embocar un gol que ni siquiera subió al marcador. El problema es que ya había sido amonestado previamente y eso produjo que resultara expulsado.
La decisión de los jueces provocó fuertes reclamos de los jugadores de Caracas, al punto que Renné Rivas también vio la tarjeta roja.
Con el pitazo final se confirmó un nuevo empate (1-1) en el clásico venezolano, el octavo consecutivo entre ambos. De esa manera, Deportivo Táchira mantuvo el liderato en la tabla de posiciones con 11 puntos, mientras que el cuadro caraqueño se quedó en la novena casilla con solo cinco unidades.
Polémica en los penales
Pero el escándalo no paró con la controversial decisión del VAR. En Venezuela se disputa una tanda de penales en todos los partidos que terminen en empate, para otro torneo separado de la clasificación de la liga local, llamado Copa Rey de Marcas.
Caracas retiró a la mayoría de sus jugadores titulares, incluido el portero Wuilker Faríñez, y falló a propósito los tres cobros que alcanzó a patear en señal de protesta por lo que había sucedido minutos antes.
Frankarlos Benítez, que reemplazó a Faríñez bajo los tres palos, ni siquiera se tiró cuando los rivales tuvieron su turno desde el punto blanco.
A pesar de que Táchira ganó la tanda con un contundente 3-0, ese resultado no modificó el empate que suma solo un punto para la liga.
Fernando Aristeguieta, técnico de Caracas, expuso las razones de la decisión que tomó el plantel. “Es difícil, después de lo que se da, salir a hacer una cuestión que es de entretenimiento, que ningún aficionado entiende. Fue una decisión que se tomó en caliente”, declaró.
El estratega venezolano se quejó de las críticas recibidas por su equipo. “Caracas, es verdad que no puede competir hoy en día con la cartera de otros equipos, pero a mí me hablan de crisis institucional cuando Caracas jugó una final acá hace ocho o nueve meses, me hablan de crisis institucional cuando es el equipo que más jugadores mete en el preolímpico y en esta ventana de pases está vendiendo tres jugadores al extranjero”, afirmó.
“Caracas sigue apostando e invirtiendo al fútbol venezolano con dinero autogenerado desde hace 35 años. Entonces, hablar de crisis institucional, es verdad que no han estado los resultados, pero yo tendría cuidado con esa insistencia porque sigue siendo de lejos el equipo más importante”, sentenció.
De cara a la siguiente jornada del fútbol de Venezuela, Táchira visitará a Puerto Cabello el próximo miércoles 28 de agosto, desde las 5:45 de la tarde en La Bombonerita, mientras que Caracas tendrá un duelo directo frente a Zamora en el estadio Brígido Iriarte de la capital, el martes 27 a las 8:30 de la noche.