Pese a ser líder de la Liga francesa y estar cerca del título, París Saint-Germain no pasa por un buen momento y la interna del club tendría complicaciones. De cara al final de la temporada, el equipo parisino estaría contemplando varias modificaciones para la próxima campaña, como el cambio de técnico y la salida de algunos jugadores.
Uno de los futbolistas que estaría en la puerta de salida es Lionel Messi, quien en los últimos días ha estado en la órbita de equipos como Barcelona, el cual busca el regreso de su ídolo, y el Al-Hilal de Arabia Saudita, país en el que están dispuestos a pagar lo que sea necesario.
A Messi se sumaría otro jugador, quien llegó como figura para la temporada 2017/18 y en seis temporadas le ha sido imposible conseguir el máximo objetivo del club, la tan anhelada Champions League. Se trata de Neymar, quien también estaría pensando en ponerle fin a su historia con el PSG.
Por esta razón el equipo francés ya estaría pensando en otro jugador sudamericano para reemplazar las ausencias que se le aproximan para la siguiente temporada. Uno de ellos sería el chileno Alexis Sánchez, de pasado en el Arsenal de Inglaterra, Barcelona y el Inter de Milán, y que actualmente juega en el máximo rival del PSG: el Olympique de Marsella de la Liga francesa.
A pesar de estar en sus 34 años, el chileno es pretendido por varios equipos europeos por su gran talento en la cancha. El París tendría en carpeta fichar a Sánchez como reemplazo de Lionel Messi, mostrando, una vez más, su gusto particular por los jugadores sudamericanos, ya que por el PSG han pasado también Ángel Di María, Ronaldinho y Edison Cavani.
Según los medios de comunicación franceses, el PSG ya se habría comunicado con el representante de Alexis Sánchez para conocer las condiciones, teniendo en cuenta que el próximo 30 de junio termina contrato con el equipo de Marsella. Sin embargo, el Olympique intentaría retenerlo ampliándole su contrato, buscando no ceder a uno de sus mejores jugadores de la temporada a un histórico rival.
Polémica en Francia luego de que futbolistas se negaran a participar en campaña contra la homofobia
El rechazo de algunos futbolistas a ser partícipes en una campaña contra la homofobia promovida por la Liga francesa aumentó el debate acerca de la discriminación que existe contra dicho colectivo en la nación europea, luego de que, según un informe publicado en los últimos días, las agresiones contra personas LGBT+ hayan ido en aumento en el último tiempo.
Con motivo del Día Internacional contra la Homofobia, que se celebra el 17 de mayo, la Liga de Fútbol Profesional (LFP) acogió el fin de semana esta campaña anual con el lema: “Homos o heteros, todos llevamos la misma camiseta”.
Pero varios jugadores se negaron a lucir la elástica con los colores arcoíris, por lo que la ministra de Deportes, Amélie Oudéa-Castera, urgió a sus clubes a “adoptar sanciones”, máxime cuando la campaña defiende un “mensaje sencillo de no discriminación”.
El Nantes (Ligue 1, primera división) sancionó así “financiera pero no deportivamente” al futbolista egipcio Mostafa Mohamed y el dinero de la sanción, que el club no precisó, “se destinará a la asociación SOS Homophobie (...) para luchar contra esta lacra”.
Sin embargo, el equipo no suspendió al delantero, autor de ocho goles esta temporada, cuando se está jugando la permanencia en las próximas jornadas en la máxima categoría del fútbol francés.
Un año después de la negativa del senegalés Idrissa Gana Gueye, entonces jugador del París Saint-Germain, este fin de semana tampoco quisieron participar el marroquí Zakaria Aboukhlal del Toulouse (Ligue 1) y el senegalés Donatien Gomis del Guingamp (Ligue 2).
Mohamed, de confesión musulmana, justificó en la noche del domingo su decisión de no participar en sus “raíces”, “cultura” y “convicciones”, pidió respeto por sus “creencias personales” y aseguró “respetar todas las diferencias”.
En una carta abierta a estos futbolistas, el Consejo Nacional de Ética (CNE) de la Federación Francesa de Fútbol consideró el lunes de “error” su decisión y les llamó a “dejar a un lado algunas de sus convicciones personales”.
“Incluso si no son conscientes de ello, se vuelven cómplices de los comportamientos homófobos”, lamentó el CNE. El Consejo, que no tiene capacidad de sanción, anunció no obstante que no llevará el caso al comité de disciplina.
El entrenador del Brest, Eric Roy, recrudeció la polémica al cuestionar la idoneidad de celebrar esta campaña en las últimas jornadas del campeonato, ya que hay clubes que se juegan la permanencia y “cada uno es libre de elegir sus opiniones”.
“La homofobia es un delito”, le respondió el vocero del Gobierno, Olivier Véran, recordando que “muchos jóvenes aún la sufren en su día a día y que todos los medios son buenos para ayudar a normalizar lo que ya es normal”.