El piloto neerlandés Max Verstappen (Red Bull) logró su primera pole de la temporada aunque le servirá de momento para salir primero en la clasificación sprint de este sábado en el Gran Premio de Emilia-Romaña, tras un viernes loco, de banderas rojas y lluvia intermitente, que pagó Carlos Sainz (Ferrari) con un accidente.
La lluvia estaba anunciada y ya marcó los libres del viernes, donde mandó el líder del Mundial, Charles Leclerc. En casa y con un inicio de temporada más que prometedor, Ferrari se las prometía muy felices, pero el monegasco saldrá el sábado segundo por detrás de un Verstappen que se puso en lo alto a tres minutos del final de la Q3.
El vigente campeón del mundo ató el mejor crono justo antes de la enésima bandera roja, esta de Valtteri Bottas (Alfa Romeo). En el tiempo restante, con lluvia, no hubo opción de mejora, y la sesión terminó incluso antes por otro accidente. Las trampas de Imola se cobraron también las opciones de salir arriba de Sainz.
El madrileño, recién renovado con Ferrari, se llevó un jarro de agua fría cuando se salió en la Q2, apretando con el anuncio de lluvia inminente. El cielo mantuvo a todos en jaque, en seco la Q1 y tormenta en la segunda sesión. Sainz ya tenía un buen tiempo para ir por la pole pero en la última curva buscando mejorar se fue contra el muro, sin opciones de recuperar su coche para la Q3, situación que lo obligó a conformarse con el décimo lugar de la grilla.
“Una pena, rápido iba toda la sesión, incluso los libres en agua me sentía cómodo. Un error un poco raro, tampoco lo acabo de entender porque no iba al límite ni tirando del coche, sabía que la lluvia iba a llegar y había que hacer una vuelta buena antes, pero también sabía que tenía margen y no necesitaba las últimas vueltas”, dijo Sainz en declaraciones a Dazn.
El español lamentó el resultado de una clasificación que pintaba a más para Ferrari. “Una pena, no me queda otra que pedir disculpas, intentar recuperar y por lo menos todavía queda el sprint de mañana y la carrera. El objetivo es remontar todo lo posible en la clasificación al sprint, asegurarnos que tenemos la oportunidad de mover hacia adelante”, concluyó.
Mercedes: otra pesadilla
El drama fue mucho mayor para los Mercedes. Tanto Lewis Hamilton como George Russell sufrieron para estar entre los 15 primeros de inicio y, más allá del agua, en la Q2 se vieron impotentes, quedando ambas ‘flechas plateadas’ fuera de la Q3 por primera vez desde el Gran Premio de Japón 2012. Cada tanda tuvo su bandera roja, la primera la de Alexander Albon (Williams), con una explosión de su neumático derecho trasero, y la segunda, la de Sainz.
Así, la clasificación duró cerca de dos horas, de inicio con neumático seco y ya después el intermedio. En mojado, durante los libres, parecía lejos Red Bull de Ferrari, pero Verstappen se desquitó de parte de los males de este inicio de campaña con una pole eso sí un tanto extraordinaria. En la Q2 se empezó a torcer para la Scuderia, con un Sainz que tendrá que buscar la remontada para tener opciones el domingo de olvidar su ‘0′ de Australia.
Con la lluvia ya para quedarse, la Q3 fue un ejercicio de supervivencia. Un experto en ello como Fernando Alonso (Alpine) se libró de las salidas de pista como pudo y saldrá quinto. El doble campeón del mundo demostró el año pasado que le gustan los sábados al sprint, aunque esta vez tiene ya una posición prometedora.
Verstappen, Leclerc, Lando Norris (McLaren), Kevin Magnussen (Haas), Alonso, Daniel Ricciardo (McLaren), Sergio Pérez (Red Bull), Sebastian Vettel (Aston Martin) y Sainz fue el ‘Top 10′, con los Mercedes de George Russell y Lewis Hamilton 11º y 13º, respectivamente.
Con información de Europa Press.