El pasado 4 de junio se anunció con bombos y platillos la llegada de Francisco ‘Pacho’ Maturana al banquillo del Once Caldas. Su aventura, el regreso al banquillo de un equipo colombiano,  solo duró 163 días, cuando se oficializó su salida. El técnico chocoano tuvo a su cargo un proyecto que nunca tuvo ni pies ni cabeza, deja una gran mancha en la trayectoria del laureado técnico.De acuerdo a un comunicado oficial del club de Manizales, Maturana no es más técnico del equipo por decisión de la Junta Directiva que “ha decidido de manera unilateral dar por terminado el contrato de trabaja suscrito” con el entrenador y su cuerpo técnico.Su salida se produce después de una pobre campaña. Solo sumó 18 puntos en 19 partidos, y ocupa el puesto 18 en la tabla. Un rendimiento de solo el 31% que sumado a lo hecho cuando estuvo al mando en 1986 (cuando Pacho debutó como técnico) es el cuarto peor desempeño de un entrenador al mando del conjunto albo.Le recomendamos: ¿Por qué James prefirió el Bayern que la Selección?Maturana había iniciado su carrera como entrenador en el Once Caldas en 1986 y 31 años después tenía la ilusión de volver a lo más alto del fútbol colombiano con el equipo que le dio esa primera oportunidad.Sin embargo,  el equipo nunca cuajó y el técnico culpó la falta de jugadores de primer nivel de los malos resultados que jornada a jornada sufría. Según él, cuando los directivos lo contactaron le prometieron un buen presupuesto para contratar estrellas pero dichos refuerzos nunca llegaron.Entre quienes convencieron al técnico que llevó a Colombia a dos Mundiales estuvieron Juan Carlos De La Cuesta y Gaston Pezzuti. Ambos con un pasado exitoso en Nacional, querían emular lo hecho en el conjunto verdolaga pero a la luz de los resultados se quedaron cortos.“El dirigente puede ver si eso le llena sus posibilidades o no, si hizo las contrataciones que debía o no, en el momento que llegué acá estaba ilusionado por un proyecto liderado por gente de éxito, como De la Cuesta y Pezutti”, dijo Maturana cuando el barco albo se empezaba hundir.“Cuando empezamos a hablar se habló de Adrián Ramos, de Rodallega, de Teo, me fui emocionando con el proyecto”, confesó el técnico que se quedó con las ganas de tener una plantilla de primer nivel y se debió conformar con jugadores de discreta trayectoria.Puede leer: Jefferson Lerma, el descubrimiento de Pékerman en la victoria sobre ChinaEn lugar de anunciar flamantes refuerzos las ruedas de prensa tuvieron un protagonista no por lo que hacía en la cancha sino por su actitud fuera de ella. Los actos de indisciplina de Yohan Arango se volvieron el centro de la conversación y el técnico debió lidiar con toda esta controversia hasta este martes cuando se separó del club.El técnico se despidió de sus jugadores en medio de fuertes acusaciones. En su salida dijo que en Manizales conoció la llamada "Payola". "En el Once conocí lo que es la "payola", averiguen qué es", dijo el técnico en su última rueda de prensa en Manizales.La ‘Payola‘ es cuando un jugador paga para poder jugar, una mala práctica de la que siempre se ha hablado pero de lo que no hay acusaciones certeras en el fútbol colombiano.Herney Duque y Juan Carlos Henao quedaron a cargo del equipo para la última fecha del campeonato. Este fue el comunicado con el que se dio a conocer la noticia.