Frank Fabra fue la tapa de las portadas del fin de semana en varios diarios deportivos de la Argentina, pero esta vez no precisamente por algún desborde o un gol. Durante el partido que su equipo, Boca Juniors, jugaba contra Estudiantes de la Plata, el lateral colombiano tuvo que aguantar durante 90 minutos una ola de insultos que iban dirigidos hacia él, por una razón específica: su color de piel. Apenas terminó el partido, el capitán del equipo xeneixe, Fernando Gago, se acercó al árbitro Silvio Trucco a recriminarle por la situación. "¿Por qué no paraste el partido? Le gritaron toda la noche"; le dijo Gago a Trucco. El reclamo de Gago después del partido habría sido por los insultos racistas de los jugadores de Estudiantes que hicieron llorar a Fabra. pic.twitter.com/HvDRD3Z5KF— Jeremías (@Jerebeam) May 8, 2017Según explicó el árbitro, los insultos fueron aislados y no producto de algún cántico o barra. Por eso, Trucco no consideró la interrupción del partido.Le puede interesar: Racismo en el fútbol ruso preocupa a la FIFAAl terminar el encuentro, después de que el juez no lo hubiese detenido, el lateral colombiano llegó al vestuario xeneixe y allí se le escaparon las lágrimas que se tragó durante los 90 minutos en la cancha. El ex Deportivo Cali fue luego consolado por sus compañeros. Y este lunes, dos días después del enfrentamiento, Boca Juniors condenó los insultos racistas que sufrió su lateral el sábado pasado.El club ‘azul y oro‘ publicó un comunicado en el que "repudia enfáticamente las agresiones verbales y los actos de discriminación sufridas por el jugador del club, Frank Fabra, en la última fecha del Torneo de Primera División, disputado el sábado pasado ante Estudiantes, en el Estadio Único de La Plata", al sur de Buenos Aires.La entidad ‘xeneize‘ elevó una queja de manera oficial ante la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y reclamó "la intención de que los referís tengan instrucciones más precisas sobre cómo actuar ante estas situaciones que resultan inadmisibles".Puede leer: Insultos racistas hacen llorar a un futbolista"Los jugadores de Boca alertaron al árbitro del encuentro, Silvio Trucco, al momento que sucedían las agresiones e incluso le señalaron desde qué sector del público local manifestaban los insultos xenófobos. Sin embargo, el partido continuó", dijo la entidad boquense.Las voces de apoyo para Fabra no se hicieron esperar. Una de ellas fue la de un ídolo de la entidad xeneixe, el colombiano Jorge Bermúdez que mediante un tweet animó a su compatriota.
Racismo, un tema difícil de erradicar en el fútbolLos insultos que el jugador colombiano recibió el último sábado son solo uno más entre los lamentables episodios de racismo que rodean al mundo del fútbol, algo que permanece a pesar de las diversas campañas por parte de la FIFA y otras entidades para erradicarlo.El pasado 30 de abril, en un partido por la Serie A italiana, el centrocampista ghanés del Pescara, Sulley Muntari, abandonó la cancha voluntariamente antes del final del partido después de reclamar en vano al árbitro que actuase contra unos seguidores que le estaban insultando con tintes racistas.
Sulley Muntari discute con el árbitro por denunciar los insultos racistas. Foto: AP"Salí de la cancha porque no tenía sentido para mí continuar si me estaban lanzando insultos racistas", explicó el futbolista ghanes una semana después de que se presentarán los insultos.Durante el encuentro, que enfrentaba al equipo de Muntari con el Pescara, el jugador recibió una tarjeta amarilla por esa reclamación y después la roja al abandonar la cancha. Le recomendamos: Racismo contra Balotelli recuerda al lado feo del fútbolEl "racismo está por todos los lados y es cada ver peor", dijo el ghanes en declaraciones a la BBC Sport este lunes. "Fui tratado como un criminal", denunció.De hecho, esta semana el centrocampista prometió que abandonará de nuevo el terreno de juego si vuelve a recibir insultos racistas durante un partido."Si vuelvo a tener el mismo problema hoy, mañana o en el próximo partido, volveré a marcharme", advirtió.Con los casos de Fabra y Muntari se hace evidente que el racismo es algo que todavía está lejos de erradicarse en el fútbol. En ocasiones anteriores, futbolistas como Freddy Rincón, Marcelo, Dani Alves y Mario Balotelli han sufrido de insultos similares.