Desde 1995 ha cubierto todos los Tour de Francia y en el Giro de Italia y la Vuelta a España también deja registro de su poderosa pluma. Carlos Arribas es un referente, casi consulta obligada, al hablar de ciclismo. No en vano lleva 25 años en El País de Madrid escribiendo sobre glorias y fracasos de los pedalistas. En esta entrevista habla de Nairo Quintana, del Giro y lo que puede ser el Tour.SEMANA: En los últimos años, el Giro fue la más entretenida de las tres grandes, con colosales batallas en la montaña y la carrera se definió en las dos últimas etapas. ¿Lo sorprende?CARLOS ARRIBAS: No sé si la más entretenida de las tres grandes (la Vuelta también tuvo su emoción), pero sí que estuvo mejor que el Tour. El problema es el Tour. Es ante la recompensa que ofrece ganarlo (para muchos es la única carrera que da la gran gloria) que se corre siempre de forma conservadora. Cualquier puesto se da por bueno. Y el año pasado, especialmente, un equipo más fuerte que los demás, el Sky, jugó al catenaccio (corrió a defenderse) y mató la carrera desde el primer día.SEMANA: Varias conjeturas se hacen sobre la participación de Nairo Quintana en Italia: una apunta a que quiere ganar Giro y Tour en un mismo año; otra a que Valverde –su compañero de equipo- sería quien lidere a Movistar en Francia; una más dice que competir en el Giro hará que Nairo llegue en mejor forma al Tour; y, por último, se especula con que Movistar ve muy difícil derrotar a Froome en esa carrera y que su objetivo son las otras competencias. ¿Con cuál se queda y por qué?C.A.: Yo creo que la corre por dos razones principales: el corredor y el equipo analizaron que en 2016 se creó demasiada obsesión con el Tour demasiado pronto. El llamado sueño amarillo estuvo presionando a Nairo desde el invierno y llegó al Tour con demasiada carga de responsabilidad. Este año, yendo por partes, primero el Giro, luego el Tour, se retrasa esa obsesión. Por otra parte, el Giro debería ser como una red de seguridad. No es que se piense que Froome es invencible, pero se sabe que caer derrotado en el Tour si antes se ha ganado el Giro no deja al corredor con la sensación de que ha pasado un año de vacío. En 2016 la victoria en la Vuelta tuvo ese efecto. Este año, prefieren llegar al Tour más descargados de responsabilidad.SEMANA: Llama la atención que el último ganador del Giro y del Tour, en un mismo año, fue el escalador Marco Pantani, en 1998, en épocas cuando el dopaje era común. ¿En el ciclismo actual es posible ganar las dos carreras en un mismo año?C.A.: La victoria de Pantani en el Tour del 98 fue casi un regalo. El caso Festina (una gran purga de ciclistas durante la carrera por dopaje) eliminó a los principales rivales y a Pantani se le perdonó la vida en las etapas planas. Fue un Tour muy extraño, por eso la comparación no vale. Un escalador lo tiene muy complicado para hacer el doblete, porque gasta muchas más energías en el Giro que las que puede recuperar para el Tour.Le recomendamos: El duro terreno del Giro de Italia que enfrentarán los escarabajosSEMANA: Miguel Indurain, sin ser escalador, también pudo…C.A.: Él, que dobló Giro-Tour dos veces, en 1992 y 1993, ganaba la carrera italiana con el esfuerzo justo, sacando en las contrarreloj la ventaja suficiente para poder defenderse en la montaña. Y en 1994 prefirió perder el Giro antes que hacer esfuerzos de más que le habrían costado el Tour. El doblete ahora no sé si es imposible, pero sí es muy complicado.SEMANA: Hablemos de los rivales de Nairo en el Giro: Nibali, gran escalador y siempre guerrero; Thomas y Landa, al mando del Sky, que no es poca cosa; Kruijswijk, uno de los grandes prospectos; Mollema, Van Garderen y Pinot, impredecibles; y Zakarín, siempre peligroso. ¿Cuál es la gran amenaza de Nairo?C.A.: Supongo que Nibali, el único junto a Nairo que ha ganado grandes carreras por etapas. Tiene experiencia y corre en casa. Sabe cómo manejarse. Los otros son secundarios. Con ellos puede Nairo en el cuerpo a cuerpo en montaña y tiene mejor equipo. La incógnita será la resistencia en la montaña y las tres semanas de los mejores contrarrelojistas: Thomas, Dumoulin y Jungels.SEMANA: En España, algunos periodistas y usuarios de redes critican lo que llaman la “pasividad” y “frialdad” de Nairo, que, según dicen, no ataca cuando debería. ¿Por qué esa imagen? ¿Tiene que ver Unzue, su técnico?C.A.: Tiene que ver que Nairo corre para ganar, no para dar espectáculo. No sé si a la gente le gustaría un Nairo a la Alberto Contador, es decir, que intenta grandes hazañas y siempre se queda corto. No se puede tener a un corredor que gane y que derroche. O una cosa u otra.SEMANA: En el ciclismo de hoy es muy raro ver ataques largos, tipo Contador el año pasado en Formigal en la etapa que definió la Vuelta. ¿Dónde quedaron los ataques largos a lo Chiapucci, Pantani, Chozas, Virenque o Fignon?C.A.: Son ataques de corredores a la desesperada, que creen que lo tienen tan complicado que no tienen nada que perder y les da igual terminar segundo que décimo. Ninguno de ellos actuó así yendo de líder. Lo de Formigal, iniciado por Contador y secundado muy bien por Nairo, fue mayormente un gran despiste de Froome y su equipo.SEMANA: ¿Existe una rivalidad interna en el Movistar entre Nairo y Valverde? En Colombia se cree que por proteger los intereses de Valverde, se ha visto afectado Nairo. ¿Y qué pasará ahora en el equipo con la irrupción de Marc Soler, que dejó a más de uno boquiabierto en la Volta a Catalunya?C.A.: No hay rivalidad interna. Cada uno tiene la oportunidad que necesita y que exige. Sin Valverde, Nairo quizás no habría ganado tanto. El año pasado, por ejemplo, Valverde renunció a pelear por el podio del Tour atacando en la etapa de Finhaut Emosson para preparar el terreno a un ataque de Nairo. Luego este se quedó clavado. Así que si en Colombia se dice que Valverde daña a Nairo en España se puede pensar lo contrario, que Nairo daña a Valverde. Hay que pensar sin banderas y sin vendas en los ojos. Marc Soler será el futuro. Convivirá un poco con Nairo como este lo hace con Valverde y seguirá creciendo.Le recomendamos: Los colombianos que darán de qué hablar en el Giro de ItaliaSEMANA: ¿Por qué cree que el ciclismo colombiano volvió en los últimos años tan fuerte a Europa?C.A.: Ha surgido una generación de ciclistas fuertes que tuvieron la fortuna de ir a correr a Europa muy jóvenes, a los 20 años, y allí encontraron territorio para crecer. Si se hubieran quedado en Colombia habrían languidecido, dado como está allí el ciclismo, la falta de carreras internacionales y de buenos equipos. Nunca habrían progresado.SEMANA: Y, como si fuera poco, resultó lo inimaginable: que uno de los grandes velocistas del momento y del futuro fuera un ciclista colombiano, Fernando Gaviria, que disputa el Giro. ¿Cómo lo ve?C.A.: Con mucho potencial para ser un grande, siempre que se acomode en el Quick Step. Es uno de los sprinters del momento con más recorrido, más opciones tácticas y más habilidad para ubicarse y saber moverse en los últimos metros.SEMANA: Después de Nairo, ¿cuál colombiano puede pelear una de las tres grandes?C.A.: Urán ya fue podio en el Giro y ya pasa de los 30 años. Sergio Luis Henao ha elegido ser un secundario en el Sky y Pantano ser un buen gregario sin más responsabilidad. Egan Bernal es muy joven y no sé cómo afectará a su progreso haber corrido en el equipo Androni. Creo que Chaves es el más capacitado, por su juventud y por lo que ha demostrado, con sus podios en Giro y Vuelta.SEMANA: Apenas vamos en mayo, pero es inevitable pensar en el Tour, en julio. El comienzo de temporada de Froome no es el mejor, a diferencia de otros años. ¿Esto indica algo?C.A.: Se parece un poco a Lance Armstrong, que según pasaban los años renuncia más a todo el calendario que no sea el Tour. Froome sigue siendo el gran favorito.Puede leer: Nairo Quintana: “Tengo los dos en la cabeza: el Giro y el Tour”SEMANA: ¿Puede ser el australiano Richie Porte el gran candidato al título del Tour? ¿Veremos el renacer de Contador?C.A.: A Porte no le veo ni continuidad ni regularidad ni capacidad de concentración para tres semanas. A Contador nunca hay que darlo por muerto.SEMANA: Ya le ganó en la Vuelta, ¿pero qué le faltaría a Nairo para derrotar a Froome en un Tour?C.A.: Lo que hizo en la Vuelta, lograr aislarlo de su equipo, que es la segunda gran fuerza de Froome, y un poco más de progreso en las contrarreloj.SEMANA: La sombra del dopaje siempre acompaña a este deporte. ¿Qué tan limpio puede estar hoy?C.A.: Un poco más limpio que hace una década.