Este lunes 17 de junio, la selección de Francia y su similar de Austria midieron fuerzas por la jornada número 1 del grupo D de la Eurocopa 2024, la cual se lleva a cabo en Alemania. Fue un gran partido, entretenido de principio a fin.
En el papel, la favorita para llevarse el triunfo era la escuadra gala y bien, esto terminó sucediendo. Francia derrotó a Austria por la mínima diferencia. Fue un insólito tanto, cabe mencionar, ya que, fue un autogol.
La jugada se presentó al minuto 37 de la etapa inicial. Kylian Mbappé encaró por la banda derecha y tiró un centro, el cual fue impactado con la cabeza por el jugador austríaco Maximilian Wöber, el cual envió sin querer la pelota al fondo de la red.
De esta manera, la selección de Francia empezó con pie derecho la Eurocopa 2024. El equipo galo se perfila como una de las escuadras a vencer en el torneo que se juega en Alemania. Sin lugar a dudas, esta escuadra es candidata al título.
Así fue el partido
Austria suponía un debut envenenado. Un equipo con identidad, en una racha de siete partidos sin derrota, incluidos un 6-1 ante Turquía y un 2-0 frente a Alemania, a pesar de que su mejor jugador, David Alaba, está en la Eurocopa como entrenador ayudante por su grave lesión de rodilla.
Desde el saque inicial se veía que no iba a ser fácil para Francia doblegar a la tropa dirigida por el alemán Ralf Rangnick: bien colocado y contundente hasta el extremo en el juego físico, aguantó sin gran sufrimiento al equipo francés, y estuvo cerca de inaugurar el marcador en el 36 en un chispazo de juego colectivo.
Apertura a la izquierda, centro al área, sutil dejada del capitán Marcel Sabitzer y Christoph Baumgartner se topa con un atentísimo Mike Maignan, decisivo en su debut como arquero titular en un gran torneo. La réplica francesa fue inmediata y definitiva, acompañada por un poco de suerte. Mbappé desbordó por la derecha, centro al primer palo y Wober cabeceó a las mallas.
Ya en la segunda parte (55) el 10 tuvo en sus botas el segundo. Lanzado en carrera por Adrien Rabiot, llegó hasta el punto de penal y ante la media salida del arquero tiró fuera. Un error extrañísimo en el nuevo jugador del Real Madrid, al que solo le quedó sonreír.
La noche de Mbappé continuó con un durísimo golpe al intentar rematar de cabeza. Estuvo varios minutos en el suelo y sangró de manera abundante por la nariz, como Griezmann minutos antes en la frente tras chocarse contra una valla. El capitán finalmente tuvo que ser sustituido (90) con la camiseta blanca teñida de rojo. Sangre, sudor y tres puntos para un subcampeón mundial que necesita mejorar.
*Con información de AFP.