Un martes de ensueño tuvo el volante James Rodríguez al anotar su primer gol en suelo catarí después de varios meses en sequía, pues su último grito había sido en el mes de abril des este año con Everton. Además del gol, el colombiano mostró sus dotes de talento y aportó en la victoria de Al-Rayyan 4-2 sobre Al-Sailiya.

Corría el minuto 74 del juego entre Al-Rayyan y Al-Sailiya SC de la liga de Catar y Mohammad Jumaa Mubarak sacó a su equipo con un pase largo que llegó a los pies de Mouafak Awad que, pese a caerse, hizo el centro al área que Boli dejó pasar para que James capturara entrando por la derecha y después de controlar el balón lo puso en la parte de arriba al arquero rival, al palo de la mano derecha. James sonrió con su primer gol, sus compañeros lo abrazaron, la tribuna celebró en Asia, el DT Laurent Blanc festejó y en Colombia las redes sociales explotaron haciéndolo tendencia.

Tras el juego, las redes explotaron aplaudiendo la actuación de James, quien también se hizo presente en su cuenta de Instagram celebrando su primer grito en el fútbol de Oriente Medio. “Primer gol”, fue el mensaje del mediocampista que subió un carrusel de fotos del juego en las que se le ve feliz celebrando la victoria de su club.

Miles de comentarios en la publicación por parte de sus seguidores no se hicieron esperar. Algunos celebraron su gol, mientras que otros pidieron su regreso a la Selección Colombia para el mes de noviembre en el que se medirá con Brasil y Paraguay.

Lo que dejó el partido

En el papel, James Rodríguez conformó una línea de tres, ubicándose detrás del 9, que fue Yohan Alexandre Mady Boli, acompañado por la derecha por Abdulaziz Hatem Mohammed y por la izquierda por Mouafak Awad. Pero en la práctica, el colombiano jugó tirado a la banda a perfil cambiado e interiorizando.

En los primeros minutos del juego, el 10 del Al-Rayyan pisó el área, pero también estuvo bien en los apoyos al retroceso. Sin embargo, los 30 grados de temperatura en el estadio Al-Gharafa de Doha hacían notar el desgaste físico que pesaba en el colombiano.

James fue de menos a más y supo manejar los tiempos del partido para controlar el desgaste. Se le vio colaborativo con el equipo, hizo paredes, cobró algunos tiros de esquina, remató de pierna derecha y filtró balones claros a ras de piso y con centros aéreos. Recibió tres faltas claras, dos fuertes en la parte de abajo, patada y pisotón, y en una oportunidad el rival lo agarró de la camiseta. Y aunque en todas las acciones continuó con dificultad, jugó todo el partido. Incluso en una jugada de ataque del rival, James llegó al cierre.

“Todos sabemos lo que ha sido su carrera, lo que ha conseguido, pero llegó cuando el torneo ya había comenzado y no pudo hacer una buena pretemporada. Va a paso lento, pero seguro nos va a deleitar con su calidad”, había expresado antes del encuentro Laurent Blanc, campeón del mundo con la Selección de Francia en 1998.