El Real Madrid se convirtió en el mejor del mundo en el 2016. Ganó los dos títulos más importantes, la Liga de Campeones de Europa (ante el Atlético de Madrid), y este domingo el mundial de Clubes (frente al Kashama Antlers). En esas dos finales, Zinedine Zidane, el entrenador más ganador del año, no le dio un solo minuto al colombiano James Rodríguez.No hay partido más importante para un futbolista que una final. De niños todos han soñado con disputar un título, con marcar el gol de la victoria, con dar la vuelta olímpica. Algo que sueñan millones, pero que solo consiguen un puñado. James Rodríguez está entre esos. Desde que tenía 12 años, cuando jugó la final del Pony Fútbol con un equipo del Tolima, y marcó un gol olímpico, está acostumbrado a jugar finales. Pero en este 2016 tuvo que verlas desde el banco de suplentes.Ver: "Estoy feliz en el Real Madrid"El pasado jueves, luego de haber jugado 18 minutos en el juego semifinal contra el América de México, y tras un elegante pase gol a su socio Cristiano Ronaldo para el 2-0, James parecía recuperar la fe, en la recta final de su año más oscuro. Pero también pareció haberla perdido tres días después, tras celebrar un título más en su impresionante carrera, pero sin haber participado del juego. James quiere jugar más y tiene ofertas en otros clubes. Así lo admitió el propio jugador después de la final del mundial de clubes.“No puedo asegurar que vaya a seguir. Tengo ofertas y tengo siete días para pensar. Estoy feliz en Madrid, pero quiero jugar más. Tengo un punto de amargura por no haber jugado en la final, pero estoy feliz por el título. Llevo 15 en mi carrera”, dijo en la llamada zona mixta. Sus declaraciones, de inmediato, causaron revuelo en los portales deportivos españoles que empezaron a preguntar a sus lectores por la salida del 10 colombiano.Desde aquel gol olímpico en la final del Pony Fútbol, James se preparó para cumplir el sueño de jugar en el mejor equipo del mundo, que para él no era otro que el Real Madrid. Mientras veía a los galácticos de Zinedine Zidane, Luis Figo, Ronaldo, y Beckham, James se convirtió en un auténtico rey midas. Salvo en el Mónaco, en todos los equipos en los que jugó disputó finales y salió campeón: Envigado, Banfield, Oporto, Real Madrid. Quince títulos en menos de 9 años.Precisamente, Zidane, el que miraba como si fuera su espejo lo considera parte de su equipo, pero no lo utiliza. Lejos estaría James en pensar que el sueño de jugar en el Real Madrid, donde fue el que más jugó en la temporada 2014-2015, el de los goles más bonitos, y el jugador con mayor número de asistencias, se convertiría casi que en su peor pesadilla. James no quiere renunciar a su sueño, tendrá siete días para decidirlo.