La situación de James Rodríguez en el Rayo Vallecano parece que no va a mejorar. El colombiano nuevamente fue suplente en el partido contra el Athletic de Bilbao y dejó una imagen que le está dando la vuelta al mundo a través de las redes sociales.
El conjunto de Vallecas empezó de gran manera, a los 14 minutos Nteka se encargó del 1-0 y puso a celebrar a la afición local. Sin embargo, con el paso de los minutos el equipo se fue desinflando y a los 65 del segundo tiempo llegó el empate. Poco después, a los 78, el club visitante puso el segundo y amargó la fiesta.
Pese a que Iñigo Pérez contaba con la opción del número 10 en el banco y lograr que manejara los tiempos del partido, nuevamente optó por no utilizarlo y no le dio ni un solo minuto, una situación que ya parece que genera una gran molestia en el futbolista cafetero.
Así quedó registrado en una imagen que captó la cámara de la transmisión oficial y en la que se ve a un James con ‘cara de pocos amigos’. Rodríguez sorprendió con su nuevo look y ahora luce un nuevo peinado, algo que se ha comentado, pero que pasó a un segundo plano.
Pocos segundos después de que el técnico Pérez utilizara el quinto y último cambio, las cámaras se enfocaron en la exestrella del Real Madrid y en su cara se percibió una gran molestia. Con una de sus manos en la boca, el mediocampista lucía pensativo y hasta con mucha desazón.
La imagen no tardó en hacerse viral a través de las redes sociales, muchos usuarios aprovecharon para opinar sobre la situación que vive el colombiano en el equipo español y lanzaron fuertes críticas en contra del estratega y la manera en la que, según ellos, está tratando al mejor jugador de la Copa América.
Finalmente, el partido terminó 1-2 en contra del Rayo Vallecano y ya se habla hasta de una posible salida de Pérez, pues son tres juegos al hilo sin conocer lo que es la victoria y sin usar a James, algo que le han pedido distintas voces.
El entrenador dio la cara tras la nueva derrota y dejó claro que sigue confiando en sus jugadores para lograr que esta situación se revierta y dejar atrás la amenaza del descenso. “Si de algo estoy seguro, es que nosotros podemos ganar a cualquier rival y a cualquier campo. Siendo objetivos, la entidad de los rivales, luego de sumar tres derrotas, es difícil”, dijo.
“El momento ahora pesa mucho en mí, en los jugadores, en la afición. Son tres derrotas consecutivas y no hay que obviarlas. Nuestra obligación es solventarlo rápidamente y pensar en el partido por Copa del Rey. Hicimos muchas cosas bien, pero en ocasiones no nos da para llevarnos los tres puntos”, agregó.
Pérez recalcó que, pese a que es una derrota que puede llegar a doler mucho, es importante pasar la página y empezar a pensar en lo que serán los otros juegos. “No podemos dejar escapar, da rabia y da tristeza por la gente que viene al campo”, manifestó.
Sobre el fantasma del descenso, el estratega español recordó que fue la misma realidad que vivieron en la temporada pasada, por lo que solo queda aceptarlo y mejorar.
“Tenemos la realidad de la derrota encima de nuestros hombros. Debemos seguir empujando y creciendo, cuando pierdes lo más importante al día siguiente es ganar. Buscaremos resarcirnos”, puntualizó.
Por ahora, con esta derrota el Rayo quedó ubicado en la posición número 13 con tan solo 16 unidades, se encuentra tres puntos por encima del descenso.