Juan Fernando Quintero fue la gran figura en la clasificación de Racing a la final de la Copa Sudamericana. El colombiano marcó doblete contra Corinthians y se ganó la ovación del Cilindro de Avellaneda, que fue una fiesta luego del triunfo de la academia.
Quintero, que viene siendo titular bajo las órdenes de Gustavo Costas, atravesó un mar de emociones tras el segundo tanto que confirmó la remontada. Después de la celebración, se arrodilló y soltó algunas lágrimas que dieron muestra del emotivo momento que pasa en el plano personal.
“Soy un elegido de Dios. Toda la gloria y la honra es para él. Simplemente trato de disfrutar”, dijo.
Juanfer se quebró en plena entrevista y dedicó la victoria a sus seres queridos. “Tiene mucho de emocional porque saben la situación que viví con mi familia, la que todavía tenemos y estoy muy agradecido de verdad”, agregó a los micrófonos de DSports. “Hacer estos dos goles después de tantos altibajos en el año, creo que me enfoqué en esto y creo que somos merecedores del triunfo”.
En entrevista con ESPN entregó más detalles. “No hay palabras para explicarlo. Fue un año muy difícil. Le quiero dedicar este triunfo a mi familia porque sufrimos mucho. Lamentablemente, no pueden estar, pero acá estamos. Soy un privilegiado del club por tener estos momentos”, indicó.
Cabe recordar que en el mes de abril de este año, Juanfer tuvo que viajar de emergencia a Colombia por los quebrantos de salud de su esposa y madre de su hija, Johana Osorio.
A través de redes sociales, el jugador llegó a pedir donaciones de sangre y suplicó a los seguidores que lo acompañaran con oraciones en ese difícil momento.
Aunque Johana mejoró considerablemente, Juanfer estuvo a punto de pedir la rescisión del contrato con Racing para devolverse a Colombia. Algunos clubes de la Liga Betplay, de hecho, estuvieron pendientes de la decisión del volante con el fin de hacerle ofertas; no obstante, se quedó en Racing con la intención de triunfar y devolver todo ese cariño que le dieron en el punto más crítico de la temporada.
Racing finalista
Juanfer Quintero disputó 76 minutos en la vuelta de la semifinal de la Copa Sudamericana.
En un partido vibrante, Yuri Alberto puso en ventaja al conjunto paulista muy temprano, pero el colombiano, figura de la noche, dio vuelta la cuenta para el equipo argentino con dos tantos en menos de cinco minutos.
“Ahora hay que disfrutar. No ganamos nada todavía. Llegar a la final es hermoso. Las finales no se juegan, se ganan. Era llegar y lograr algo con Racing de manera internacional. El sueño de llevar a Racing está a un paso. Hay que seguir juntos. Lo de la gente fue extraordinario. el recibimiento fue conmovedor”, declaró el técnico Costas.
Para Racing es una instancia histórica, ya que vuelve a una final continental después de 32 años, y en Asunción buscará volver a ganar un título internacional tras 36 años, desde la obtención de la Supercopa Sudamericana 1988, su última gran conquista, también frente a Cruzeiro, el mismo rival con el que se cruzará en Paraguay.
El elenco albiceleste también logró romper un dominio casi hegemónico del fútbol brasileño, que se aseguró la Copa Libertadores con la definición entre Botafogo y Atlético Mineiro, y podría haber hecho lo mismo si Corinthians dejaba en el camino a Racing.
“El grupo es lo más importante, lo defiendo. Me dieron todo. Hicimos un partido inteligente contra un gran equipo. Cerramos los espacios que habíamos dejado abierto en el primer tiempo. Acá no importa Costas, ningún técnico. Tenemos que llevar a Racing a lo más alto. Tenemos que ser conscientes de que no logramos muchas cosas”, completó el entrenador de 61 años.