Los trabajos de pretemporada del Liverpool en Dubái están a punto de terminar con caras largas por la recaída en la lesión de Luis Díaz, que, presumiblemente, estará fuera de las canchas al menos hasta el mes de marzo, cuando se espera termine su recuperación de la cirugía a la que se sometió esta semana de regreso en Inglaterra.

Jurgen Klopp, entrenador de los reds, habló después del último amistoso ante Lyon, en el que cayeron por 3-1, y aseguró que la noticia fue un “golpe en la cara” al haber sentido tan cerca el regreso de un jugador indispensable para el andamiaje ofensivo del Liverpool.

El estratega alemán lamentó que el colombiano no se encuentre “en el mejor lugar” mentalmente, producto de este nuevo problema físico que lo alejará de las canchas casi hasta finales de la temporada y le hará perderse los choques directos ante Real Madrid por los octavos de final de la Champions League. “Es una gran decepción para todos nosotros y para él también”, dijo.

“Honestamente, no fue nada en el entrenamiento”, reveló Klopp, asegurando que Díaz venía sintiendo algunas molestias en la zona de la lesión. “No le dolía mucho al día siguiente, pero queríamos ser muy cautelosos y dijimos: ‘Está bien, vamos, echemos un vistazo’”, agregó.

Los primeros exámenes arrojaron la posibilidad de una recaída que, de regreso en Merseyside, se confirmó como una lesión en el ligamento colateral medial de la rodilla, viéndose obligado a entrar al quirófano. “Luego llegó la noticia y fue un verdadero golpe en la cara, eso es todo ahora”, concluyó.

Mirada en el reinicio

Perder a Luis Díaz impactó irremediablemente en que la preparación para retomar la competencia oficial sufriera un obstáculo de última hora. El guajiro se perfilaba a ser titular en el duelo de copa ante el Manchester City, el próximo jueves 22 de diciembre, fecha para la que probablemente tampoco podrán contar con Ibrahima Konaté, clasificado a semifinales de Qatar 2022 con la selección de Francia.

A los que sí espera reencontrar de regreso a suelo inglés son a los ya eliminados: Darwin Núñez, Virgil Van Dijk, Alexander-Arnold, entre otros, que tendrán que cambiar el chip rápidamente para intentar revertir la situación deportiva que no fue la mejor en la primera parte de la temporada, sobre todo en lo que refiere a la Premier League, en la que marchan sextos.

“Hablamos mucho de eso. Para mí fue muy bueno porque tuve tres semanas de descanso y ahora entrenamos, pero es un problema para los jugadores. La final es el 18 de diciembre y el 22 la competencia de copa comienza de nuevo”, explicó.

La idea de Klopp es empezar a cosechar puntos en el torneo local hasta que llegue la llave de la Champions, donde volverán nuevamente las rotaciones con el fin de manejar las cargas de los futbolistas que estuvieron en un intenso mes de Mundial. “Ese es el plan que queremos perseguir; queremos estar realmente listos de inmediato. Es por eso que tenemos que usar el tiempo ahora, tenemos que entrenar y realmente darles a los muchachos la intensidad adecuada en el entrenamiento”, señaló.

“Soy positivo, pero por supuesto jugamos con equipos duros, duros. Comenzamos con Manchester City y luego jugamos contra Aston Villa con un nuevo entrenador. Estarán muy energizados, así que eso está claro, lo sabemos, pero queremos ser, nuevamente, el equipo más difícil contra el que jugar y depende de nosotros serlo”, completó.

Antes de volver a casa, Liverpool enfrentará un amistoso más en Dubái contra el Milan, oportunidad de oro para volver a la senda victoriosa y sepultar los temores de una afición golpeada por las lesiones y los resultados en lo que va de temporada.