La vida de Radamel Falcao García podría resumirse en lo que le sucedió el pasado miércoles. El jugador samario anunció la llegada de su tercer hijo, y su equipo, el Mónaco, clasificó de forma memorable a los cuartos de final de la Champions League. La alegría no fue completa. ‘El Tigre’ debió ver el partido desde la tribuna como consecuencia de una ruptura de fibras del músculo oblicuo. Una de las tantas lesiones que llegan en los momentos más inoportunos. La misma que lo volvió a dejar fuera de la Selección Colombia, de la que es su goleador histórico.Esta noticia es un baldado de agua fría para el samario y sus seguidores, que después de varios años tenían la esperanza de volver a ver al ‘Tigre’ en un buen momento futbolístico y aportando goles al equipo nacional.Le recomendamos: Pablo Armero y Cristian Zapata regresan a la SelecciónSin importar si va a estar o no para estos duelos fundamentales en el objetivo de clasificar a Rusia 2016, si hay algo que el Tigre le ha enseñado al país es que sin importar las dificultades que se le presenten, él va a dar todo para superarlas y alcanzar las metas que se ha planteado.El jugador colombiano ha tenido una vida en la que suerte le ha sonreído en la mayoría de veces. Su primera gran bendición fue su habilidad para jugar fútbol que lo llevó a emigrar a Argentina a una temprana edad ganándose una oportunidad de estar en uno de los equipos más históricos del continente, River Plate.En el equipo de la raya cruzada tuvo un arranque soñado, logrando siete goles en siete partidos en el Torneo Apertura 2015, cuando solo tenía 19 años de edad. Se ganó todo el cariño de la afición del equipo millonario con lo que vislumbró una carrera llena de éxitos.Pero en el siguiente año una lesión frenó el meteórico ascenso del delantero nacional. El colombiano sufrió la ruptura del ligamento cruzado de su pierna derecha. Hace algunas dpécadas era sinónimo de colgar los guayos, pero a Falcao ni siquiera se le pasó por la cabeza esa posibilidad.Puede leer: Finales adelantadas en los cuartos de final de la Champions LeagueUna disciplina inconmensurable junto con la fe en que Dios tenía un plan mucho más grande para él, lo llevaron a recomponerse de esta dolorosa lesión tras 10 meses, en los que sufrió como nunca lo había hecho en su vida. Largas y tortuosas terapias que quedaron reflejadas en las lágrimas y el sudor producto de esta ardua recuperación.Todo este trabajo se vio justificado cuando regresó en 2007 y disputo uno de los partidos más icónicos de su carrera. Frente a Botafogo, Falcao fue el artífice de una remontada histórica en la Copa Sudamericana, marcando tres goles, incluyendo uno en el último minuto para la clasificación de los millonarios a los octavos de final de la Copa Sudamericana. Ganándose un espacio en el corazón de todos los hinchas ‘millonarios’ que disfrutaron este encuentro.En Argentina, el ‘Tigre’ terminó marcando 36 goles en 92 partidos y logrando un título (2008) con River Plate. En este país no solo consolidó su carrera profesional sino que también alcanzó uno de sus más importantes logros a nivel personal pues en su tránsito en el país gaucho conseguiría a su compañera de vida, Lorelei Tarón.Junto con la rubia argentina empacó maletas con rumbo a Europa. En el Porto y en el Atlético de Madrid, Falcao vivió cuatro años de fantasía pues logró múltiples títulos y se convirtió en uno de los mejores delanteros del mundo gracias a sus épicas actuaciones con los clubes de Portugal y España.En este lapso, el colombiano logró 7 campeonatos locales y ganó dos Europa League quedando como goleador, una en cada equipo. Además de una Supercopa de Europa en la que deslumbró al mundo del fútbol con una de las mejores actuaciones individuales en la historia de este emblemático partido.Puede leer: Falcao, James y Cuadrado: tres colombianos en los ‘cuartos’ de la ChampionsTras este cumulo de logros los mejores equipos del viejo continente lucharon por hacerse con los servicios del artillero samario, que se terminó decantando por pasar al Mónaco, equipo que hizo la mejor oferta económica y que iniciaba un fuertemente financiado proyecto, liderado por el magnate Dmitry Rybolovlev, invirtiendo en varios de los mejores jugadores de Europa, entre los que se encontraba su compatriota James Rodríguez.Esta decisión fue fuertemente criticada, ya que Mónaco venía de ascender de la segunda división de Francia y no disputaba ninguna de las dos competiciones europeas.Mientras tanto, Falcao era el eje de la Selección y con sus goles el equipo dirigido por José Pékerman se acercaba a regresar a un Mundial. En otra actuación que quedó grabada en la mente de los aficionados de ‘La Tricolor’, ‘El Tigre’ consiguió dos goles para el empate frente a Chile en Barranquilla con el que se alcanzó el ansiado pase a de Brasil 2014.En Mónaco, el colombiano mantuvo oídos sordos hacía las críticas y siguió dulce con las redes, logrando 9 goles en los 17 partidos en los que alcanzó a jugar, antes de que se presentará el episodio más negro de su vida, pues en un partido de poca importancia correspondiente a la Copa de Francia, Soner Ertek del Chasselay lo chocó y la consecuencia fue la rotura del ligamento cruzado anterior de la pierna izquierda.A pesar de intentar la recuperación en tiempo récord, al ‘Tigre’ no le alcanzó y quedó marginado del Mundial de Brasil 2014. Perdiéndose el campeonato por el que tanto había luchado.Desde dicha lesión la carrera de uno de los mejores futbolistas de la historia de Colombia se disipó y pesar de que se produjo su esperada llegada a clubes grandes como lo fueron Chelsea y Manchester United. La falta de oportunidades y su condición física evitaron que pudiera volver al nivel de sus primeras temporadas en el viejo continente.Pero la persistencia del colombiano es infinita y cuando todo el mundo creía que su carrera estaba terminada renació como el ave fénix y en su regreso al equipo del principado ha probado que se mantiene en la elite de los delanteros a nivel mundial, habiendo logrado 26 goles en 32 partidos.En este regreso, el Tigre también ha encontrado piedras en el camino varias lesiones han frenado su racha goleadora. La más reciente fue en el partido con el Bordeaux cuando recibió un golpe cerca a la cadera que le produjo la ruptura de fibras del músculo oblicuo.Le recomendamos: ¿Quién sube y quién baja esta semana?Esta lesión lo marginó del duelo con Manchester City y podría dejarlo fuera de acción por 12 días, tiempo suficiente para que se pierda los próximos partidos de la eliminatoria con Colombia, en los que se había creado una gran expectativa porque podía significar su regreso en su mejor nivel a la Selección, después de casi 4 años de irregularidad.No será la última convocatoria, tampoco será la última lesión que se ensañe con Falcao. Lo seguro es que el Tigre de Santa Marta se levantará después de esta nueva caída.