Pepe Costa, considerado la ‘sombra’ del argentino Lionel Messi, también deja el conjunto catalán. Su función estaba orientada a ayudar a los futbolistas a solucionar tareas administrativas o cualquier suceso extradeportivo.

Medios deportivos en España indicaron que el contrato de Costa había expirado el pasado 30 de junio y que no le habían renovado en el Barcelona, a la espera de lo que aconteciera con Messi. Por lo tanto, después de 17 años, se marchará del conjunto catalán junto al deportista que, todo parece indicar, es un hecho que llegará al PSG de Francia.

El reemplazo de Costa sería el ex taekwondista y campeón olímpico Joel González, que empezaría sus nuevas funciones en el Barcelona en el transcurso de los próximos días.

En caso de que finalmente se haga oficial la llegada de Messi al PSG, Pepe Costa se reencontraría con su hijo Álvaro, el cual también ejerce funciones similares a las de su progenitor, pero con el brasileño Neymar, una de las figuras del conjunto francés.

Luego de haberse despedido del FC Barcelona este domingo, la estrella Lionel Messi puede estar más cerca este lunes del París Saint-Germain, que daría un golpe de efecto en el ‘mercato’.

La espera en vano en el aeropuerto de Bourget no ha desanimado a los hinchas: este lunes, decenas de ellos seguían aguardando en el pequeño aeropuerto de la región parisina.

Desde el inesperado anuncio de la marcha del argentino de su club de siempre, el jueves, el planeta fútbol contiene la respiración y escruta el menor movimiento del futbolista de 34 años. El PSG es el club que tiene más opciones de firmarlo. El domingo en su rueda de prensa en Barcelona el propio jugador reconoció que era “una posibilidad”.

“La noticia se espera el lunes, incluso el martes. Es el escenario más probable”, avanzó este lunes por la mañana el diario Le Parisien.

Por su parte, para L’Equipe “no parece más que una cuestión de horas”. El periódico señala: “entramos en los días más increíbles de la historia del campeonato francés”.

Antes de la firma del contrato en París, el jugador tendrá que pasar primero su reconocimiento médico.

Pero la ‘Pulga’ marca los tiempos y prefirió dedicar al Barça el que podría ser su último fin de semana como jugador sin contrato.

El domingo, en las entrañas del Camp Nou, donde forjó su leyenda, Messi, entre lágrimas, clamó su amor por el club al que llegó con 13 años.

“Nunca imaginé mi despedida porque la verdad es que no lo pensaba”, confesó, revelando que estaba dispuesto a bajarse el sueldo a la mitad para poder quedarse.

Pero el Barça renunció a prolongar su oneroso contrato, que expiró el pasado mes de junio, esgrimiendo el elevado riesgo que supondría para sus depauperadas arcas.

Este lunes por la mañana, las imágenes del argentino llorando coparon las portadas de diarios deportivos españoles como Marca, As y Sport, que tituló: “Todos los culés lloramos contigo, Leo”.

El PSG no podía dejar escapar la oportunidad, ante la búsqueda perpetua de sus ricos propietarios (QSI) de superestrellas que desarrollen su marca.

En efecto, a raíz del anuncio de la marcha de Messi el jueves, el PSG no tardó en contactar con el entorno del jugador.

El club galo le ofrece un salario anual neto en torno a los 40 millones de euros (47 millones de dólares), según la prensa francesa, situándolo por encima de Neymar (36 millones de euros; 42 millones de dólares). La duración del contrato sería de dos años, con opción a un tercero.

El músculo financiero de QSI y el relajamiento de las normas de ‘fair play’ financiero de la Uefa hicieron posible una operación que pocos concebían apenas dos meses atrás.

El París Saint-Germain, que derrotó al Troyes el sábado en Ligue 1 (2-1), ha preparado el terreno para este ‘big bang’ capaz de llevarlo a otra dimensión, tanto deportiva como económica.