El Cóndor, como orgullosamente le dicen sus paisanos de Cómbita (Boyacá) a Nairo Quintana, ha volado tan alto que este 11 de septiembre, en Madrid, se ha convertido en el mejor ciclista colombiano de todos los tiempos. Con solo 26 años ha sido el único latinoamericano en ganar el Giro de Italia, el segundo colombiano en ganar la Vuelta a España, y en los años que tiene por delante no escatimará esfuerzos para convertirse en el primer nacional en vestirse de amarillo en los Campos Elíseos de París, donde ya sabe lo que es lucir la de pepas rojas, como campeón de la montaña, así como subir al segundo lugar del podio. Pero más allá de las conquistas conseguidas sobre su ‘caballito de acero’, Nairo también va camino de convertirse en uno de los colombianos más admirados de la historia, en un colombiano ejemplar. En conferencias de prensa, en entrevistas, el ciclista boyacense enamora con sus palabras y sorprende por su madurez. Las  que pronunció este domingo  en la plaza de la diosa Cibeles, en Madrid, pusieron los pelos de punta a cientos de miles de colombianos que lo acompañaron en su coronación, y robaron lágrimas a los millones que, a este lado del Atlántico, no quitaban la mirada de las pantallas de televisión que retransmitían la consagración de Nairo en la capital española.Tras bajarse de la bicicleta, luego de cruzar la meta, Nairo le dedicó su triunfo a sus compañeros de escuadra, el español Movistar. “Es el mejor equipo del mundo, gracias por regalarme esta victoria, y hacer que este sueño se convierta en realidad”. No tuvo más palabras y se marchó a llorar en los brazos de su entrenador, Eusebio Unzué. Sí, el mismo que descubrió y explotó el potencial del grandioso Miguel Induraín, y lo acompañó a ganar cinco tours de Francia. Desde entonces el entrenador vasco no se la jugaba tanto por un pedalista como ahora con el colombiano. “Faltaba pasar la línea final, hasta no pasarla no podía levantar los brazos. Es un orgullo ver a un equipo como el que tengo apoyándome y a mi compañero Rojas que hoy nos ha hecho mucha falta, va por él este triunfo”, dijo ante el segundo micrófono que encontró en su camino.  "La mejor de mi carrera", así definió Nairo la Vuelta a España a la cadena Espn. Y no solo por su desempeño, también -según sus palabras-, “por el escenario y los actores", refiriéndose a la calidad de sus rivales. "Fue espectacular, una vuelta muy bonita”.Aunque tuvo etapas de ensueño, como su escalada y consagración en los Lagos de Covadonga, Nairo asegura que el mejor día fue este domingo 11 de septiembre, y reveló que desde aquella etapa en la que se apoderó de la camisa roja, compitió con un fuerte golpe en una costilla, tras una fuerte caída, que lo afectó para respirar, pero que decidió esconder de sus rivales y también de la prensa.En la penúltima etapa, la prensa española había cuestionado que Nairo no hubiera tenido un gesto de deportividad con Chris Froome, a quien pasó en la meta luego de resistir sus ataques definitivos.Un periodista de la Televisión Española, el mismo que había insinuado la situación, volvió a especular y le preguntó sobre la conversación que el colombiano sostuvo con el británico en la carretera, champagne en la mano. “¿Le pediste excusas?”, le preguntó.“Para nada. Él me respeta, yo le respeto. Es un gran rival, nunca hemos tenido ningún lío y no queremos que los medios nos metan en polémicas”, dijo Nairo y se marchó. Antes de comenzar la etapa, Froome publicó en su Twitter la foto aplaudiendo a Nairo con un mensaje de felicitación. Pese a ello, la prensa española insistía en señalar a Nairo como villano.   Ya en el podio, micrófono en mano, y muy emocionado, Nairo se destapó con sus mejores palabras. “Es una gran responsabilidad llevar el nombre de Colombia ante el mundo, el día de hoy lo estamos haciendo. Que el mundo sepa que nuestro país es paz, deporte y amor”.  Allí volvió a agradecer a sus compañeros de equipo. “Me han traído hasta este podio tan soñado”. Dedicó palabras de admiración a sus rivales: “Felicito a Chris (Froome) que es un gran rival, es un orgullo para mi compartir podio con él. Y orgullo tener a Esteban Chaves, que así como yo hemos venido cumpliendo sueños, este año han sido cuatro podios en las grandes competencias para Colombia". Pero sobre todo para agradecer a la gente:  "a todos los españoles y a todos los visitantes que han venido a darnos ánimo. Sin el público todo nuestro trabajo no tendría valor”. A su izquierda, el ‘Chavito de América‘ no tenía necesidad de hablar, su inmensa sonrisa lo decía todo, y contagiaba a todos los que la estaban viendo. Abajo del podio, y en entrevista para el Telediario de la Televisión Española, Nairo recordó a Luis y Eloisa, sus padres, quienes desde Cómbita confesaron que no se cambian ni por el Rey de España, con todas sus coronas. “Gracias, primero por darme la vida, por educarme y por darme fuerzas para estar donde hoy estoy”, les dijo desde Madrid. Qué sería de Colombia si todos fuéramos como Nairo Quintana.