Admirados por la gesta histórica que están logrando en Qatar, los marroquíes aprietan los dientes y planean ya la semifinal del Mundial 2022 contra Francia del próximo miércoles, a pesar del cansancio, las lesiones y los riesgos de más bajas. “Sentimos dolores, pero vamos a prepararnos, no tenemos elección”, cuenta el centrocampista incansable Sofyan Amrabat, que “comenzó el partido (contra Portugal, 1-0) sin estar fresco al 100 %, pero hace falta darlo todo y pelear hasta el final”.
“Ya estábamos cansados después de los 120 minutos contra España (0-0, 3-0 tras penales en octavos de final)”, añade el jugador de la Fiorentina, una de las revelaciones de esta Copa del Mundo por su inagotable actividad.
Para el partido contra Portugal, en cuartos de final, Walid Regragui había “perdido a dos jugadores importantes con (Nayef) Aguerd y (Noussair) Mazraoui. Pero los que entraron hicieron un trabajo extraordinario”. El seleccionador podría no recuperar a tiempo a estos dos jugadores para semifinales. Jawad El Jamiq y Yahya Attiat Allah deberán continuar ocupando sus puestos contra Francia.
Probablemente sin Aguerd ni Saiss
Regragui ha perdido probablemente también al otro miembro de su defensa, el capitán Romain Saiss, que abandonó el terreno de juego en camilla al inicio de la segunda parte del encuentro contra Portugal. “Mi muslo, veremos, vamos a hacer pruebas”, explicó el capitán marroquí, revelando haber “jugado sobre una pierna durante 55 minutos” contra Portugal.
Se llevó la mano a la parte trasera del muslo en el momento del potente disparo de Bruno Fernandes por encima del larguero (minuto 45). “Ya me dolía antes del partido”, suspira Saiss. El defensa del Besiktas, quiere creer en sus opciones de recuperarse: “Voy a hacer todo para estar ahí”, promete. “Quiero ayudar a mi equipo, pero hay momentos en los que hace falta ser razonable y no ser un peso solo por orgullo personal”.
Sin Aguerd ni Saiss, Regragui debería jugar con su defensa suplente, asociando a Achraf Dari, jugador del Brest, y a El Yamiq, jugador del Real Valladolid. Este último tuvo una sólida actuación en octavos, pero Dari podría tener más problemas para frenar al trío atacante francés compuesto por Kylian Mbappé, Olivier Giroud y Ousmane Dembelé.
“El sentido de la lucha”
Pero Marruecos tiene la mejor defensa de esta Copa del Mundo, pues ningún equipo ha logrado marcarle un gol, siendo el único tanto encajado, uno en su propia portería de Aguerd contra Canadá (2-1).
Poco importan los nombres, “defendimos con el sentido de la lucha, en equipo”, destaca Sofyan Amrabat. “En el fútbol, las individualidades marcan la diferencia, pero son los equipos los que ganan partidos”.
El lateral derecho Achraf Hakimi también ha tenido molestias desde el inicio del torneo, pero el jugador del París Saint-Germain está ofreciendo a pesar de ello un rendimiento impresionante.
A otros dos jugadores titulares les falta rodaje por el poco tiempo disputado con sus clubes desde el inicio de temporada. Salim Amallah “está en el armario” del Standard de Lieja por problemas contractuales, se queja Regragui, y Hakim Ziyech ya ha jugado más minutos en la Copa del Mundo (458) que esta temporada con el Chelsea (271), tras no entrar en los planes de Thomas Tuchel ni en los de su sucesor, Graham Potter.
Los extremos “Ziyech y (Sofiane) Boufal nunca han corrido tanto”, celebra Regragui. “Pero lo hacen por su país, naturalmente. Tenemos que luchar más que los demás, no tenemos las mismas armas”.
Contra los portugueses “volvimos a darlo todo, jugamos con el corazón”, señala Amallah. “Sabemos que mañana hace falta empezar a trabajar para el próximo partido” contra Francia. Pero “No tenemos miedo de nadie”, avisa.
Con información de la AFP.