El pasado 29 de marzo ocurrió lo que muchos colombianos presentían desde hace varias semanas, pero que muy pocos querían creer: la Selección Colombia quedó eliminada del Mundial de Catar 2022. Después de asistir a dos citas mundialistas seguidas (Brasil 2014 y Rusia 2018), el onceno cafetero no pudo concretar su tercer mundial en línea, aun quitándose de encima una racha de 26 años sin ganar a Venezuela de visitante.
El triunfo en tierra venezolana no sirvió de mucho, pues los dos goles anotados por Perú contra Paraguay les dieron la opción a los incas de quedarse con el puesto de repechaje e ilusionarse aún más con una clasificación a la próxima Copa del Mundo.
Sin embargo, además de la derrota, dolorosa de por sí, la realidad es que Colombia no solo se queda sin Mundial, sino que el comercio del país se quedará también sin la entrada económica que significa para un país la participación de su selección de fútbol en esta importante competencia internacional.
Según las cuentas que sacan las principales organizaciones gremiales en Colombia, los comerciantes perderán la oportunidad de ganar más o menos medio billón de pesos, resultado de la venta de camisetas, artículos decorativos, de fiesta, compra de alimentos, consumo en restaurantes, bares, entre otros sectores de la economía colombiana.
“La no participación de la Selección Colombia en el Mundial afectaría duramente las ventas de empresas vinculadas a gastronomía, bares, comidas rápidas, domicilios, camisetas y otros artículos de vestuario, suvenires, agencias de viajes, aerolíneas, cerveza, licores y refrescos en general, tv por suscripción, televisores y algo muy de la entraña emocional del colombiano: el álbum de Panini”, dijo hace algunas semanas el presidente de Fenalco, Jaime Alberto Cabal.
En cuanto al sector de la gastronomía y los bares, es importante recordar que son varios los restaurantes y demás sitios de comidas que dejarán de ver millonarias ventas, teniendo en cuenta que serán muy pocos los asistentes que decidan ver un partido del Mundial por fuera de sus hogares. Aunque las pérdidas no son totales (habrá aficionados que decidan ver encuentros de la copa en estos sitios), lo cierto es que las ganancias no serán tan altas como se tenía previsto en caso de que Colombia hubiese clasificado al Mundial.
“El sector (gastronómico) se estaría viendo afectado en unos 350 mil millones de pesos en esas ventas que no va a poder generar, debido a que no habría el mismo nivel de convocatoria y de afluencia”, indicó Brany Pardo, presidente encargado de la Asociación de la Industria Gastronómica.
“Ese incremento de ventas se da por ese público que llega en un horario no convencional y que, de acuerdo con el comportamiento que tenga el partido, los consumidores pueden quedarse en los establecimientos y eso genera consumo y unas ventas desde más temprano”, dijo por su parte la presidenta de la Asociación de Bares de Colombia, Adriana Plata.
Cabe recordar que durante el Mundial de Rusia 2018 se realizó una encuesta por parte de Fenalco, en la que el 67 % de los colombianos consultados aseguró que habían comprado la camiseta de Colombia, ya sea en puntos autorizados o en los llamados ‘puntos piratas’, que no son otra cosa que sitios atendidos por trabajadores informales del comercio.
Por último, también es importante mencionar que, en el caso específico de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF), se estaría perdiendo un premio aproximado de 11,7 millones de dólares, correspondientes al 2,3 % de los 509 millones de dólares que la Fifa dará en premios durante este Mundial. Este dinero será otorgado a todas las selecciones que lograron clasificar a la Copa del Mundo; recordando que los equipos que superen la fase de grupos irán ganando un premio mayor.